¡Kat Emerson realmente podría usar un milagro navideño! La aspirante a cantante y compositora puede tener grandes sueños, pero tiene problemas aún mayores. Tratada como una sirvienta por su vanidosa madrastra y hermanastras egoístas, Kat se ve obligada a realizar un trabajo desmoralizador como elfo.
Las navidades nunca estarían completas si no existiesen películas como ‘Una cenicienta moderna: un deseo de Navidad’, ya que para el público más joven suponen un aliciente y una película de la que disfrutar en una tarde de vacaciones. Cumple totalmente con ese objetivo, el de satisfacer una demanda adolescente. Esto dicho, claramente no es una buena película o una cinta pensada para adultos. Para esta categoría de humanos hay otras muchas como ‘The holiday’ o ‘Love Actually’ que sobrepasan nuestras expectativas de lo que debe ser un largometraje de Navidad.
Música, baile y personajes que trabajan en una ciudad de Navidad habitada por elfos ayudantes de Santa Claus. Una mezcla un tanto extraña pero que medio funciona. La banda sonora no es para el recuerdo pero sí lo suficientemente pegadiza como para pasar la película bailoteando en pleno espíritu navideño. Por supuesto, como no podía ser de otra forma, las partes de coreografía están demasiado forzadas aunque no hay muchas ya que se tuvieron que estar debatiendo entre hacer un musical o una película normal y no se aclararon mucho.
Los protagonistas de la película son Laura Marano y Gregg Sulkin. A la protagonista femenina la has visto en papeles de producciones como ‘Saving Zoë‘ o ‘La cita perfecta’, mientras que Sulkin te suena de verlo en la serie de Marvel, ‘Runaways‘. Ambos actores hacen un buen papel teniendo en cuenta las circunstancias del guion y la trama de la película. Ambos personajes se enamoran aún sin saber sus identidades, algo un poco cogido con pinzas y que podrían haber hecho más realista, como otras tantas cosas en las que no vamos a entrar.
No solo los personajes principales llaman nuestra atención (más o menos). En una historia como es Cenicienta debe haber una malvada madrastra y por supuesto unas hermanastras a las que querríamos encerrar en una alta torre y tirar la llave a un pozo. Objetivo cumplido al 100% en este casting. Los personajes son odiosos en todo lo que hacen o dicen, y atreverse a interpretarlos se merece un buen aplauso por nuestra parte, porque lo cierto es que las odiamos conforme las vemos.
Pero claro, en un cuento como es este no todos los personajes podían ser así, y en este caso el hada madrina es la mejor amiga de Kat, Isabella Gómez, quien tiene mucha mano con la costura y un optimismo y confianza en sí misma tremendos. Este personaje hace de guía a lo largo de toda la película, aunque si tenemos que elegir un secundario es sin duda la mascota de la protagonista. No habla, pero ni falta que le hace para sacarnos una sonrisa cuando se encuentra en pantalla.
Sin lugar a dudas es una Navidad de cuento la que se presenta en este largometraje, esperamos que en siguientes ideas similares los personajes femeninos sean creados con una mayor profundidad y no se caiga en fáciles estereotipos en tan contadas ocasiones.
¿Pasa el corte?
Overall
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Interpretación
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Originalidad
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Fotografía
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Guión
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Montaje y edición
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Banda Sonora
Puntos fuertes
- Unos personajes que te encantarán
- Magia navideña en grandes dosis
- Un romance que no empalaga