‘The Wailing’, terror en todas sus modalidades (Na Hong-jin, 2016) | A Buenas Horas

La vida de un pueblo coreano se ve alterada por una serie de asesinatos, salvajes y misteriosos, que azota a la pequeña comunidad rural. Los rumores y las supersticiones se propagan a causa de la presencia, desde hace poco tiempo, de un anciano extranjero que vive como un ermitaño. Ante la incompetencia de la policía para encontrar al asesino y sin tener una explicación racional, algunos habitantes del pueblo buscan a un chamán. Jong-Gu, un policía cuya familia está directamente amenazada, también cree que se trata de crímenes sobrenaturales.

‘The Wailing’ o ‘El extraño’, como la conocemos en nuestro país, es una cinta simplemente asombrosa. Sus 156 minutos pueden echarte para atrás, pero los obviarás si quieres ver una de las mejores cintas de suspense/terror que puedan caer en tus manos. Si conoces a su director, Na Hong-jin, de otras cintas como ‘The Chaser’, sabrás de lo que hablo, y si es de tus primeras incursiones en el cine coreano, acabarás regresando a buscar el título que acabo de mencionar, porque del cine coreano, una vez se entra, ya no se sale.

Esta película lo tiene todo si te gusta el terror. En ella verás una combinación o secuenciación casi perfecta de lo que entiendes por una cinta de zombies, otra de fantasmas, una de demonios, chamanismo e incluso una posesión a la vieja usanza. Todo ello aderezado con un paisaje en el que la lluvia no cesa, donde los bosques son infinitos y donde encuentras uno de esos pueblos que más bien debería llamarse aldea con hogares más bien medievales.

Cinco personajes clave para no perderse en el visionado.

  • Kwak Do-won es Jong-goo, el policia al que le viene, pero que muy grande, todo lo que está ocurriendo en su localidad. Es a su vez el padre de Hyo-Jin, y ésta será la conexión que mueva toda la cinta. Probablemente lo hayas visto recientemente en ‘The man standing next’, y por eso te suene. Aquí, el nivel de patetismo que refleja su figura lo hace casi ser su propio antagonista.
  • Hwang Jung-min interpreta al chamán Il-gwang, quien es contratado para salvar la vida de la joven Hyo-Jin, a la par que para expulsar al malvado espíritu que no deja de atormentar la tranquilidad de esta preciosa zona rural. Probablemente te suene de haberlo visto en ‘Train to Busan’.
  • Chun Woo-hee da vida a Moo-myung, una Dama de Blanco, ese tipo de fantasma femenino, típicamente vestida con un vestido blanco, normalmente vista en áreas rurales y asociada con leyendas locales de tragedias. Las leyendas que giran a su alrededor suelen estar relacionadas con una muerte accidental, asesinato o suicidio, y el tema de la pérdida, la traición de un esposo o prometida y el amor no correspondido. Las interpretaciones que le darás a su personaje aquí serán cambiantes, lo que no cambiará es la fuerte sensación de presencialidad a pesar del poco número de escenas con las que cuenta.
  • Jun Kunimura es ‘el japonés’, ese hombre que habita en mitad del bosque y del que sospecharás desde el primer minuto, aunque tus dudas se irán acrecentando conforme corra el metraje, habiendo momentos en los que no sabrás que creer, tendrás pocas pruebas, pero tu instinto no te engañará esta vez.
  • Kim Hwan-hee como Hyo-jin, esa niña que ya aparece algo más grande en ‘When the Weather is Fine’ y que aquí presenta una interpretación radical, absolutamente impactante y de una calidad asombrosas a pesar de su joven edad. Es esa representación del bien y el mal, que luchan en un mismo espíritu. Nos permite hablar de la corrupción del alma, de la inocencia y de su pérdida.

Junto a estos cinco personajes deberás estar muy atento a las referencias que se hacen a unas setas y unos productos en mal estado, ya que será esa la explicación lógica, racional o científica que se proyectará en la cinta para dar sentido a unos hechos que te harán tirar por la ventana todo el raciocinio y explicación plausible que puedas concebir en tu mente.

Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.

La religión o más bien las creencias de todo tipo son clave para poder ver ‘The Wailing’ sin sucumbir a al caos reflexivo que propone. Es ciertamente compleja de ver, su duración no ayuda, y solo si estás preparado para ella la podrás disfrutar plenamente. Si eres de esos a los que le gustan las cosas claras, y el chocolate espeso, ya te puedo decir que esta cinta no es para ti. Aún así, si eres capaz de darle una oportunidad te sorprenderás con sus muchas referencias religiosas, morales y costumbristas. En eso es un sinfín de detalles. Vemos como la Iglesia Católica aparece y no consigue dar respuesta a un padre desesperado, a pesar de las muchas connotaciones demoniacas que se vierten a lo largo del metraje, por no mencionar la presencia de un cura que intentará ayudar en todo lo posible, viéndose su fe puesta a prueba por las acciones que acabará llevando a cabo a pesar de su propia reticencia.

Este no creer por parte de unos hará que otros medios, quizá mucho menos comunes para nosotros, pero ampliamente aceptados en culturas orientales, hagan acto de presencia, y así el chamanismo llama a nuestra puerta y se mete de lleno, inundándolo todo, desde el color de la cinta hasta el tempo y sonido de la misma. Las partes en las que el chamán Il-Gwang aparece en escena son hipnotizantes. Los ropajes, los cánticos y las danzas nos absorben y transportan a otra era, mucho más mística, que abre un sinfín de posibilidades que van más allá de lo meramente terrenal.

Escenas poco agradables también tienen cabida en ‘The Wailing’, y son magistrales a su manera. La violencia, como en cualquier cinta coreana que se precie no tiene parangón. Las partes más duras de ver son las de la niña y su posesión demoniaca. Tampoco son muy placenteras las muchas peleas que se gestan en esas casas destartaladas que solo se encuentran decoradas con velas, restos de animales y un olor a muerte y desesperación que incluso notas desde casa y que contrastan fuertemente con el encanto del bosque milenario que las acoge.

Na Hong-jin entrega una película muy compensada. Su historia, a pesar de sus muchas vertientes y elementos que no parecen encajar, acaba ofreciéndonos una cinta hilada y con cohesión. Las localizaciones escogidas cuidan hasta el más mínimo detalle, y los personajes secundarios ofrecen una sensación de naturalidad y verismo al conjunto que consigue acrecentar la inquietud y desasosiego que nos toma conforme empiezan las primeras lluvias torrenciales. Gran parte de culpa de esa intranquilidad la tiene la producción de sonido y la banda sonora, cuya presencia es constante y no deja descanso, salvo en contadas ocasiones, y es entonces cuando uno se plantea que quizá sea mejor ese fondo continuo al silencio desgarrador del que no sabes que esperar.

‘The Wailing’ puede verse en Prime Video. ¿Le darás una oportunidad? Si es así, pásate y déjanos un comentario con tus impresiones.

Tráiler

¿Pasa el corte?
Overall
3.9
  • Fotografía
  • Guion
  • Edición y montaje
  • Interpretaciones
  • Edición de Sonido
  • Originalidad
Sending
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Puntos fuertes

  • Todo en uno. Si quieres ver terror, aquí encontrarás todos los géneros.
  • Impresionantes paisajes
  • Muy buena cinematografía

Otras cintas coreanas que merecen, y mucho, la pena son:

‘Burning’, la miseria existencial (Lee Chang-Dong, 2018) | Filmin

‘The Divine Fury’, la mano de Dios (Kim Joo-hwan, 2019)


Lee lo que viene a continuación si ya has visto ‘The Wailing’.

¿Aún andas dándole vueltas a ese final apoteósico? Normal, yo estaba igual, pero hay una cosa clave que seguro no te ha pasado desapercibida, y eso es la caja de fotografías que debería haberse encontrado en casa de ‘el japonés’, pero que tu ves justo al final en el maletero del chamán. ¿Te chirría un poco? Tiene su explicación.

En una escena eliminada que ocurre justo al final de la cinta, se ve al japonés sentado en un banco junto a la carretera. Él ve a una familia al otro lado de la carretera e invita a un niño a acercarse a él ofreciéndole dulces, pero la madre recoge al niño antes de que ella logre alcanzar al extraño. Entonces llega un coche conducido por Il-gwang, el chamán, y recoge al japonés antes de irse. En el centro de la carretera, Moo-myeong presencia cómo el coche se desvanece en el horizonte…

¿Te han dado ganas de una segunda parte? No eres el único. Te esperamos en la próxima.

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