Narra la historia de una mujer en busca de su camino en la vida. Perdida tras la muerte de su madre, descubre que puede conocer a su padre e inicia un camino lleno de aventuras, en el que la sororidad de otras mujeres le ayudará a conseguir su meta. Pasará por pueblos y ciudades con el anhelo de reencontrarse con su pasado. Sin embargo, este camino le llevará por una senda en la que su percepción propia, su valía, su autoestima, le permitirá encontrarse consigo misma.
Una película que busca mucho más que entretener trabaja con una dificultada añadida siempre. No puede aburrirte, porque si no la parte de enseñanza o mensaje que quiera dar pasa totalmente desapercibida y además ese mensaje ha de ser dado de una manera en la que el criterio principal de enganchar al público suceda. ‘Hoy es todavía’ tiene mucho que contar, y desde su estilo novel va desgranando capa a capa según avanza la trama aquellas historias ocultas que en su principal parecen esconderse, pero que son la tela perfecta para tejer una emotiva historia de viaje personal, sororidad y crecimiento.
‘Hoy es todavía’ tiene una alta capacidad de mostrar mucho con su cuidada fotografía. Los elementos que se van sucediendo en pantalla forman una bella relación de colores y todos y cada uno de ellos parecen tener expresión propia para alimentar la potencia de las imágenes que tenemos. Esto hace que la propia personalidad de la película se vea aumentada gracias a su cromatismo y a la potencia del mismo. Cuando unimos esto a un guion cuidado, no complejo en exceso, que va guiando el camino del espectador por la trama de la cinta de una manera clara, nos da como resultado que la película este contándonos una historia que, a pesar de lo compleja que pueda resultar, se torna confortable para el público en términos de modo en el que lo disfrutamos.
Hay diversas escenas que enfocan la historia y la reorganizan, en instantes en los que quizás la misma se vaya por derroteros no tan esperados conforme la trama avanza. Bien es cierto que narrativamente la película está bien enfocada y que cuenta con una buena organización desde su inicio hasta su desenlace, por lo que otorgarle a la misma un ritmo que fuese ágil lo veo de capital importancia para que el nudo de la película no fuese tedioso. Ese ejercicio de montaje resulta correctísimo.
Se nota el rollo amateur en determinados instantes, algo que lejos de ser negativo bien que le otorga un punto muy propio a ‘Hoy es todavía’, y esto nos deja una película entrañable, bastante sencilla en su caminar por la trama pero con mucho elementos que la hacen distinta en el sentido más bondadoso de la palabra. ‘Hoy es todavía’ es, cuanto menos, un curioso viaje cinematográfico.
Tráiler de ‘Hoy es todavía’.
¿Nos encanta?
Overall
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Originalidad
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Fotografía
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Edición y montaje
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Banda Sonora
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Guion
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Interpretaciones