En la charla de hoy hablamos con el cineasta, investigador y documentalista, Ángel Rueda, que actualmente dirige el (S8) Mostra de Cinema Periférico en A Coruña, un evento cinematográfico anual donde confluyen las expresiones más vanguardistas del cine y donde desarrolla su actividad como programador y comisario audiovisual.
Te dejamos a continuación todo lo que nos ha ido contando de esta Mostra que va a sorprenderte y a abrirte nuevos caminos y experiencias visuales.
Marta: Ángel, muchas gracias por concedernos este rato estando tan cerca de la inauguración de la Mostra.
Ángel: Gracias a vosotros por la cobertura.
Marta: Bueno, supongo que la primera pregunta es casi obligada. ¿Cómo ha sido gestionar la Mostra en plena salida o ‘fin’ de pandemia?
Ángel: Bueno, están siendo tiempos extraños, mira que llevamos años haciendo el festival (12), pero retomarlo presencial y retomar cierta actividad con público es como si empezáramos de cero, es como mover una montaña casi. Es increíble cómo en tan poco tiempo ‘nos han quitado’ que ciertos hábitos. La parte organizativa está dando mucho trabajo porque aquí en Galicia aún hay muchas limitaciones de aforo y queremos que todo sea lo más natural posible, cómo debe ser un festival de cine, algo participativo.
Marta: Está siendo un reto para todos rehacer nuestras costumbres dentro de una nueva ‘normalidad’, aunque debo decir no comparto mucho el uso de esta palabra.
Ángel: Sí, si antes nada era normal, !¿Cómo va a serlo ahora?! El año pasado sin ir más lejos nos enfrentamos al reto del festival en línea u online, había que reinventarse, y los festivales tenemos esa capacidad. Aún así este año queríamos recuperar esos espacios de encuentro, las salas y los invitados y asistentes, pero ha costado poner en marcha esos engranajes y mecanismos que hasta ahora eran naturales en nosotros. A día de hoy dedicamos más tiempo a hablar de temas organizativos en torno al Covid-19 que sobre el contenido del festival en sí mismo. Tenemos, constantemente que reivindicar que la cultura es segura, y decir que sentimos envidia, por ejemplo, del deporte, que no cesó su actividad, aunque la vio modificada, pero ha encontrado alternativas. Es muy complejo organizar un festival cuando las restricciones en cuanto a participación son tan duras y luego ves como en las terrazas la gente está sin mascarilla. Se habla mucho de las medidas de recuperación de ciertos sectores, pero la cultura queda olvidada y altamente damnificada por las circunstancias que nos han tocado vivir. La sensación es ser los últimos de la fila.
Marta: Esa es la sensación también para quienes cubrimos los eventos y actividades que creáis dentro del sector cultural. De todo esto que me comentas viene entonces que os hayáis pasado a un proceso que habéis llamado ‘Dual’, ¿no? Otros muchos festivales se han mudado directamente a lo online, a Filmin, por ejemplo. Para aquellos que estamos super lejos, es maravilloso, pero esconde también su lado oscuro como es el no contacto real y la participación social.
¿Cómo lo hacéis vosotros? ¿Proyectáis físicamente y se habilita a su vez un live streaming? ¿Son eventos paralelos o distintos? Qué nos puedes contar de este apartado técnico.
Ángel: El año pasado lo tuvimos que idear, no hubo cancelación, pero si aplazamiento, lo cual nos permitió convertirlo en un reto a la hora de replantear cómo acercar una propuesta cinematográfica concreta que es la seña de identidad del festival, sea el que sea. Había que intentar mantener la línea del festival y el nuestro es uno muy presencial. Es muy importante la presencia de los cineastas, pero también es clave cómo se ven esas películas, ya que hay un componente casi artístico, muy por encima de otros discursos, y hay cabida a los formatos originales, profesionales que trabajan aún con la emulsión, con la película, que ellos mismos proyectan. Es decir, que realmente, hasta la propia exhibición de la película es parte de la propuesta del festival. Un cineasta no solo viene a aclarar unas preguntas en alguna que otra entrevista, sino que a veces tiene que remangarse y proyectar su propia película. Por todo esto no queríamos buscar un sucedáneo ni queríamos generar una realidad virtual de ese momento tan físico que es la proyección, así que ideamos este concepto de dualidad en el que la parte digital fuera complementaria y no que fuera sustitutiva. Por eso no entendíamos ir a Filmin. Nos parecía que hay otros tipos de cine que se acomodan a esos espacios, pero que nosotros teníamos que generar nuestro propio formato, para no perdernos en ese mar de festivales que es Filmin a día de hoy.
Nosotros contamos con una sede física que no queríamos perder, pero también cuenta con una sede virtual que es su página web, donde se encuentran los contenidos, la información y sus redes y que por lo tanto teníamos que aprovechar las herramientas de las que ya disponíamos y autoproducirnos en nuestra propia plataforma y de ahí salió ese concepto de dual, de camera obscura.
¿Que és Camera Obscura?
Para nosotros es un espacio que recupera una vertiente de los años setenta. Lógicamente nosotros nos movemos en el cine experimental, el cine de vanguardia y el cine contemporáneo, y la inspiración vino del ‘screening room’. Para nosotros es vital el proceso divulgativo, y este concepto se amoldaba a la perfección a nuestras necesidades.
De 1972 a 1981 en la televisión pública de Boston, Robert Gardner condujo un programa que se convertiría en una referencia y en una serie de culto para la comunidad del cine experimental: Screening Room. Por él pasaron los más relevantes cineastas de vanguardia de su tiempo, a quienes Gardner entrevistaba en profundidad, ofreciendo también a los televidentes la oportunidad de conocer su obra incluyendo en el programa alguna de las piezas de esos cineastas. Desde 2020 el (S8) se inspira en el mítico programa de Gardner (con el Cinéastes de notre temps de Janine Bazan y André S. Labarthe también en mente) para crear Camera Obscura, un programa emitido en streaming realizado con una estética peculiar y una clara vocación creativa.
En esta sección nos adentramos en el proceso con una entrevista a un cineasta junto al visionado de su obra. Esto es lo que normalmente teníamos en el festival y nos encantaba hacer esos encuentros con el público y explicar todos los procesos que se han llevado a cabo durante la creación de las obra en cuestión. Esto genera un vínculo muy interesante y no queríamos perderlo. De alguna manera este formato de camera obscura nos permite desarrollar los procesos de creación viendo a su vez la obra, pero siempre de mano del autor y con ese formato de entrevista.
Para poder llevarlo a cabo se ha construído un plató completamente de fondos verdes para que fuera todo como un croma gigante. Además, usamos la videoconferencia, pero no a lo ‘talking heads’. Estamos todos saturados de zoom y otros programas que preferimos grabar nosotros las entrevistas con los cineastas y a través del croma construir o dar la sensación de que estaba dentro del plató, generando así un diálogo en el que no fuera tan importante el medio, sino la conversación, la propuesta y lógicamente ese visionado de películas que aunamos a ese gran coloquio que hacíamos.
Esto fue una experiencia muy positiva en la edición del 2020. La gente fue muy receptiva a tener una propuesta diferente, que no cayese en la monotonía que estábamos presenciando, como hablábamos antes, en Filmin. Por eso, ante la limitación de aforo, este año hemos querido mantener este nivel extra de apertura al público.
En la edición del 2020 podemos calcular una presencialidad física del 25% y una virtual del 75%, siendo la de este año, una vuelta a la tortilla, donde recuperemos todos los días del festival, todas las sedes y todas las sesiones, pero seguimos pensando en ese público que por limitaciones de aforo no puede asistir, y de ahí que, hayamos mantenido ese formato dual habiendo varios programas de camera obscura.
Este año contamos con Jodie Mack, que es una cineasta que hacía animación, animación experimental y sobre todo hace como un cine muy táctil, donde hay una parte muy orgánica y en el que podremos ver un recorrido bastante amplio por su obra y a parte, pues comentado por ella. Y sí, acercándonos como te digo a algo tan interesante como es la animación. Esa animación desde el punto de vista casi no narrativo, más bien visual.
Desbordamientos
Desbordamientos es una seña de identidad del festival desde sus comienzos. Este año se centra en la figura de Val del Omar, como cineasta casi revolucionario en las formas y también en el lenguaje cinematográfico.
Esta sección tiene performances que utilizan en el tiempo real como una de sus herramientas en las que el público está construyendo en paralelo a esa experiencia visual que propone el cineasta. Esta sección de desbordamientos cuenta presencialmente con Bruno Delgado, un cineasta sevillano, que presenta ‘Preliminary log’ como un entorno de proyección a modo de cuaderno de bocetos preliminares del proyecto en ciernes ‘Frame Manoeuvres to Port‘, que se ha desarrollado específicamente en los puertos de Toronto y de A Coruña, y que plantea dos investigaciones en paralelo, una sobre la confluencia de los paisajes portuarios de ambas ciudades, y otra acerca de los propios dispositivos de filmación y de proyección centrada en la formación de los límites del fotograma y de los bordes de la proyección. También contaremos con los cineastas Helena Girón y Samuel Delgado el jueves 3 de junio a las 23:00 horas en la Fundación Luis Seoane.
Tenemos, además, la noche berlinesa’, una performance que va de la mano de cineastas residentes en Berlín como son James Edmonds y Deborah S. Phillips. La primera parte de la noche estará dedicada a los trabajos multiproyección de Edmonds. Una serie de «presentaciones expandidas» en doble y triple proyección en super 8 a velocidad variable de sus piezas. La segunda parte de la noche estará tomada por Deborah S. Phillips, quien sonorizará en directo sus piezas de diversas maneras.
Vamos a cerrar esta sección con Esperanza Collado quien presenta su nueva propuesta, ‘Kicked with the Front Foot on the Dark Side of the Deck‘. Un entorno construido de experimentación e improvisación performativa con luz proyectada, juegos cromáticos, película en 16mm, sonido en vivo e intervenciones directas de skaters y performers que elaboran instalaciones mutantes. Partiendo de las relaciones y potencialidades espaciales, plásticas y performativas del aparato fílmico —entendido este como formación “proyectiva y mnemónica”—, tratamos de desafiar los formatos tradicionales de exposición de la imagen-movimiento para situarnos entre el entorno sensorial, el arte de acción y la instalación inestable
Todo esto que acabamos de mencionar es donde cobra sentido lo dual. Es algo que se va a presenciar, pero que a su vez lo vamos a emitir por live streaming a través de nuestras redes y en nuestra página web, por lo que todos contenidos siempre se van a poder ver en abierto.
Encuentros profesionales
Creemos que el festival tiene que asumir cada año como una propuesta o lanzar una idea. Este año la intención era hacer una reflexión sobre lo importante que es el cine presencial. Ese sueño colectivo que es la proyección, ese recuperar la fantasmagoría y la ilusión óptica.
Para ello hemos creado un encuentro profesional que se va a llamar ‘Micro is Big’ que va a recoger, pues precisamente esta experiencia cercana que hemos tenido durante el confinamiento, en los cuales cines y salas pequeñitos o familiares han resistido dentro de todas las restricciones. Tienes los micro cines, espacios en Barcelona como Zumzeig o la sala Numax en Galicia. En ellas el cine más independiente ha encontrado la posibilidad de mantenerse medio en funcionamiento cuando realmente lo que han desaparecido del mapa ha sido los grandes multicines.
Nos gustaría por ello que en este encuentro profesional, bajo ese nombre, ‘Micro is Big’, lo pequeño es grande, mire al futuro y vea cómo las plataformas y cómo las grandes producciones se han posicionado dentro de la distribución online como la esencia del cine, y que quede patente, que esos lugares más recogidos, íntimos, lo que es más cercano, y que no requiere de una gran infraestructura e inversión, resulta, es lo que consigue mantener la esencia de lo que la mayoría de nosotros entiende por cine, y, por ir al cine.
Para ello vamos a contar con la participación de Halter, que es un pequeño cine en Nueva York, el que va a conectarse de manera online. También va a estar Damien Sanville, de Close Up Cinema en Londres quien nos va a contar como en su espacio pequeñito ha mantenido a pesar de las restricciones su oferta. Es un espacio donde ya no solamente es cine, sino que es librería, espacio de encuentro y donde se generan muchas actividades en torno a las películas.
De España participarán Zumzeig, de Barcelona y Numax de Santiago de Compostela. Vamos a hablar del presente pero, por supuesto, también de lo que creemos es el futuro donde esperemos proliferen estas pequeñas salas que mantendrán esa posibilidad de ver cine. Siendo cines a los que ir a ver lo que realmente te interesa. Lugares en los que no solo se paga esa cuota de ocio, algo solo de entretenimiento, sino que realmente genere un espacio compartido, de perspectiva, en definitiva un espacio vital. Y este encuentro profesional nos parece que va a estar muy en sintonía con las propuestas, que desde el festival se lanza como es recuperar las salas y de recuperar la caja oscura, la cámara oscura. Ese cuarto donde se apagan las luces y todos compartimos ese sueño colectivo.
Se podrá participar en estos encuentros profesionales de forma online, gracias al live streaming.
En profundidad
Esta sección atrae a una serie de cineastas en los que nos interesa profundizar en el conjunto de su obra. En este caso contamos, con artistas que hemos mencionado antes como son Déborah o James. Con ellos hacemos un pequeño guiño dentro del festival, a la presencia de lo plástico en nuestro festival. Nos parece muy interesante hablar sobre arte y como este modifica la narrativa cinematográfica.
Y bueno, en este caso, Déborah y James son dos ejemplos muy característicos de alguien que no solo se dedica a hacer películas, sino que interviene de una manera más total en su discurso artístico a través de distintos formatos.
Enriquecernos a través de ellos, que llegan al cine a través de otras corrientes artísticas que no son la puramente cinematográfica. Ver así, cómo gracias a esta contaminación de otros lenguajes el cine también crece, evoluciona y sigue sorprendiendo.
Pero también tenemos, hablando del cine de artistas plásticos, otro caso interesante como es el cine salido de arquitectos, concretamente los sevillanos Juan Sebastián Bollaín, al que le hacemos un foco en profundidad que ya que también cuenta con un extenso programa en Camera Obscura, entrevista que grabamos en el mes de abril en Sevilla y que ahora pondremos abierto con algunas de sus piezas.
Lógicamente, con sus películas en formato físico, porque apostamos mucho por el tema del formato original. Y se podrán ver obras de otros, años 70, 80 en Super 8 y 16 se van a poder proyectar este formato original durante el festival. Contaremos con su presencia en directo y creemos que va a ser muy interesante su aportación a la hora de profundizar en esa capacidad de transformación que tiene el cine. Esa capacidad que es un hecho que tiene el cine, pero que en este caso viene de la mano de alguien que es arquitecto, al que vemos transformar y hacernos soñar a través de la manipulación de la película y del trampantojo visual.
Por todo esto va a ser una sección muy interesante y que se va a contabilizar con alguien también más joven, pero también más contemporáneo, como es el caso de Bruno Delgado que participa también en la parte ‘Desbordamientos‘. En el caso de Bruno, un cineasta en el que la impronta de la arquitectura está muy en su obra, pues de esa manera, casi como de describir espacio o de habitar el espacio cinematográfico a veces con su huella, con su cuerpo, a través de acciones que graba y que nos permiten de alguna manera como delimitar esa ventana que es el cine y ese espacio arquitectónico que es el encuadre.
Agradecemos enormemente a Ángel Rueda su disposición y tiempo y le deseamos un enorme éxito en esta nueva entrega de la Mostra de Cinema Periférico.