Desde su debut el 17 de diciembre de 1989, se han emitido más de 700 episodios, y probablemente hayas visto más de un 80% de ellos mientras comías o esperabas a comer tras volver del colegio, si naciste en los 90, o eras padre ya por aquella época. Seas del año que seas, conoces a estos personajes amarillos con los que nos sentimos enormemente identificados, ya sea por situaciones o formas de ser que se encuentran plasmados en sus cientos de personajes.
¿Qué otra serie conoces con 33 premios Emmy, 32 premios Annie y un premio Peabody? Pues eso, aquí va nuestra selección. Esperamos vuestros momentos favoritos en los comentarios, que seguro son muchos y memorables a más no poder, como estos que os traemos.
¡Corre, plátano! – Jaime Garzía
Quizás uno de los momento más reconocidos por todos cuando hablamos de ‘Los Simpsons’, y es que el bueno de Ralph no da para mucho, pero es verdad que es todo bondad y que gran parte de los momentos graciosos de la serie le tienen a él como protagonista.
El hijo del jefe de policía Wiggum deja escenas memorables en muchos de los episodios a lo largo de todas las temporadas, pero esta escena en uno de los lugares en los que los niños de la serie más rienda suelta dan a su imaginación como es el autobús escolar no podía faltar en un recopilatorio de escenas de la serie por su día internacional. ¿Os imagináis a un plátano ganándole una carrera a una manzana y a una naranja? Ralph sí, y en esa inocencia es donde está lo maravilloso de la escena.
Pá loca tú, calva – Marta Pedraza
Todos nos hemos reído a carcajada limpia con este momento. A su favor, un pedazo de trabajo de traducción al español. Pocas veces pasa que el momento es mucho mejor en nuestro idioma que en el escrito originariamente, pero en este episodio pasa, y queda indiscutiblemente para el recuerdo.
Es, además, uno de esos momentos, como otros tantos, profundamente educativos. Sin darte cuenta, y con una enorme dosis de ironía, ‘Los Simpsons’ vuelven a dar un golpe sobre la mesa y valoran y permiten brillar a esas fascinantes cosas que nos hacen únicos a cada uno de nosotros.
Sin lugar a dudas siempre escogería este momento.
Unicornios, fantasía y magia… – Kike Domingo Luna (Kuik)
Mamá qué me estás mezclando polietileno con poliuretano – Jessica Huete
Maaaarge. Todos hemos sido Homer y todos hemos recriminado a Marge tal flagrante equivocación. Y si no lo has hecho, no eres un verdadero fan de ‘Los Simpsons’. Y si esto te parece poco, este maravilloso momento, culmina con un afligido Homer reciclando papel. Como bien dice Lisa, Reciclar no es motivo de risa, es una cosa muy seria.
Oigo cavar pero no oigo cortar – Juanjo Castillo Mayenco (Mayen)
Este episodio es uno de los más recordados por los fans. ¿Quién no se acuerda de la canita al aire de Homer y Ned en Las Vegas? Una larga noche ¡y con dos anillos de boda inesperados!. En esta escena vemos ese tipo de comentario un comentario que, siendo un niño, no entendía. Con con el paso de los años se ha convertido en una de las muchas expresiones de Los Simpson que uso a menudo con mis amigos. «Oigo cavar pero no oigo cortar».
No podía dejar de resaltar este guiño a nuestro hidalgo favorito. En esta escena Homer es muy yo.
Decisiones imposibles – Estrella García Albacete
Elegir el mejor momento de ‘Los Simpsons’ ha sido la decisión más difícil de mi vida, aunque he pasado tardes repasando los mejores capítulos (eso es bueno). Y es peor que decidir a quién quieres más: a papá o a mamá (eso es malo). Al menos, en casa me han echado una mano con la decisión (eso es bueno), aunque no nos hemos puesto de acuerdo (eso es malo), y por unanimidad (eso es bueno) se ha elegido como momentazo simpsons total el Yogulado (eso es muy bueno).
Me ha sido casi imposible elegir un solo momento de ‘Los Simpsons’ y es que no estamos hablando de una serie mítica sin motivo. Y tengo el corazón dividido entre esa intro imitando a ‘Los Picapiedras’ (ya sabemos que Homer es el tío más grande que la historia ha daaao) y Mamá se llevó las pilas. Pero me decantaré por el Homer vagabundo con su armónica en honor a todas las veces que he cantado con amigos por la desgracia de que mamá se llevara las pilas que tanto duran.