Quentin Tarantino, a lo largo de su carrera ha conseguido alzarse con multitud de premios y con taquillas que han llegado a recaudar grandes cifras. El reconocimiento que fue adquiriendo a medida que una película suya saltaba a la palestra del séptimo arte se fue haciendo cada vez mayor, y la aglutinación de críticas positivas y grandes palabras sobre sus aptitudes le hicieron valedor de distinciones importantes.
En 1993 su película Reservoir Dogs consiguió hacerlo vencedor en el Premio de la crítica del 4º Yubari International Fantastic Film Festival. Así comenzó el baile de premios en su nombre…
En referencia principal a los premios más importantes que ha conseguido, empezó allá por 1994, donde su película Pulp Fiction y el guion de la misma, tan magnifico, le sirvió para alzarse con el BAFTA, el Oscar y el Globo de Oro como mejor guion original; a la par que estuvo nominado a los mismos premios como mejor director. Además, también consiguió la Palma de Oro del mismo año con esta cinta.
Pero eso era el comienzo; al año siguiente, 1996, la película Abierto hasta el amanecer, en la que formaba parte del reparto, le sirvió para llevarse una nominación a los premios Razzie en esta categoría, aunque finalmente el premio tuvo que recogerlo Marlon Brando por La isla del Doctor Moreau.
Durante unos años, los premios se olvidaron de él; pero en 2005 se hizo con el premio Icono de la Década de los premios Empire.
Estuvo nominado en el Festival de Berlín a mejor actor por Jackie Brown, y en el de Sitges como el mejor director y guion por Reservoir Dogs.
Había que esperar dos años más, hasta 2007, para ver su nombre como nominado en un festival de grandes premios: su película Death Proof le confirmó en la lista de la Palma de Oro de ese año como uno de los directores de moda.
En los años 2009 y 2010, Malditos Bastardos le hizo estar presente en las grandes galas, donde a pesar de no alzarse con ningún premio, y ser uno de los nominados en todos, estuvo en las quinielas para conseguir la Palma de Oro del festival de Cannes, los premios al mejor director y guion original en los BAFTA, los Globos de Oro y las estatuillas de los Oscar. Además, la producción del documental Freedom's Fury le hizo ser condecorado con la Orden al Mérito de la República de Hungría junto con Lucy Liu y Andy Vajna.
En 2011 recibió un César Honorífico de la Academia del Cine Francés y el premio el premio Music and Film en los Critics' Choice Awards; recibiendo así una insignia por la gran elección y ejecución de la música en todas sus producciones.
Django desencadenado es otra de sus obras que le hicieron ser quien es, y pasearse por la alfombra roja en las mejores galas cinéfilas del mundo. Resultó vencedor como mejor guion original en los BAFTA de 2012, y en los Globos de Oro y los Oscar de 2013; además de ser nominado para mejor director en las dos primeras. En cuanto a premios, los principales que ocupan las vitrinas de este director, para algunos justamente y para oros lo contrario, son los mencionados.
La recepción de las películas en taquilla para un director también forma parte importante del devenir del mismo en el complicado y tortuoso camino de Hollywood. Las producciones de Tarantino siempre han tenido una acogida buena por parte del público, que al fin y al cabo, son los mayores críticos.
Su película Reservoir Dogs, por ejemplo, comenzó con 1,2 millones de dólares de presupuesto, y si en su semana de apertura en los EEUU alcanzo la cifra aproximada de 150.000, al término de su proyección había recaudado más de dos millones. Y eso solo en su país de origen, pues en otros lugares como Reino Unido alcanzo los £ 6.306.205 brutos.
Pulp Fiction consiguió batir el umbral del presupuesto (aproximadamente los 8 millones de dólares) en la misma semana de su apertura, donde se fue hasta cerca de los 9.300.000 dólares. El montante de la película al finalizar su proyección en EEUU fue de $107,928,762, y en España llegó a los 2,154,375.
Otro de los grandes títulos de Tarantino, la historia de Kill Bill, contó con uno de los mayores presupuestos (30 millones). Al finalizar su proyección, la cinta había recaudado más del doble del coste inicial en EEUU, y alcanzo la cifra de €4,955,003 en España, donde Tarantino ya es más que conocido.
Otro título, Malditos Bastardos, comenzó con un presupuesto cercano a los 75 millones, y terminó consiguiendo más de 120.
Y el proyecto que más desembolso inicial tenia, Django desencadenado, cuyos 100 millones de presupuesto obligaban a una película que en taquilla fuese cuanto menos atractiva, alcanzó cotas más altas que los 160 millones brutos.
Tarantino y su varita mágica convierten la producción que tocan en algo digno de admirar y de disfrutar; pero para los que mandan y verdaderamente importa el dinero que una de estas genere, la creación de sus películas asegura una cantidad de beneficios razonablemente superior al coste iniciado para la consecución de las mismas; y así, Tarantino es quien es a día de hoy.