‘Dunkerque’ es una maravillosa inmersión cinematográfica a todos los niveles. Actualmente pocos son los directores capaces de crear cine de una manera tan única, sentida y vivida. Christopher Nolan es sin duda uno de los grandes directores del momento, ha conseguido transformar sus películas en auténticas experiencias cinematográficas, desde ‘Origen’, pasando por el ‘Caballero Oscuro’, la inmensa ‘Interstellar’ hasta su última producción.
‘Dunkerque’ es una vivencia en sí misma, el propio Nolan explicó que el reto no era la escala de semejante superproducción, sino el estilo narrativo, y una vez más lo ha logrado. Dos horas de absoluta absorción, tensión y sufrimiento por tierra, mar y aire, no ves la película, formas parte de ella. ‘Dunkirk’ se rodó para ser vista en Imax o 70mm, en palabras del propio director, “verla en otro formato es como verla en un Smartphone”.
Creedme si os digo que semejante experiencia no está completa si no tenéis la oportunidad de seguir los consejos de Nolan, y no hay sitio mejor para verla en 70mm que en el Phenomena de Barcelona, el único cine de toda España donde poder disfrutar películas en dicho formato. Exclusiva en todos los sentidos, una sala retro con el mejor sonido, proyectores en digital y analógico, lugar de culto y peregrinaje para los cinéfilos de la ciudad condal. Un santuario del cine con luces de neón de las salas de antaño donde uno puede ver los últimos estrenos, los mejores clásicos, pases sorpresa, dobles sesiones, noche de pizza, cerveza y cine, y mucho más, todo ello en una inmensa pantalla y el mejor sonido. ¡Una gozada!
El viernes Phenomena ofrecía una de sus Secret Permiere, un preestreno sorpresa, si, créelo, el público paga sin saber lo que va a ver, y aun así se llena hasta los topes. Se proyectó ‘Atómica’ de David Leitch, con Charlize Theron de protagonista título que se estrena el próximo 4 de agosto. Durante el previo Nacho Cerdá, Director de la sala, explicaba que el propio Nolan fue a probar la proyección de ‘Dunkerque’ a Phenomena y hasta el día del estreno dejó la cinta atada con una cadena, llevándose la llave para que absoluta mente nadie tuviera acceso a ella hasta el día del estreno. Lo retro está de moda y los celuloides de 70mm han pasado del olvido a ser muy codiciados por los sibaritas del cine.
He sido muy crítico por lo general con esta película, a la hora de exponer a mis conocidos mi opinión sobre ella la he castigado bastante. Pero después de leer tu crítica me he dado cuenta de que debería informarme mas antes de dar mi opinión.
Aun así, mis gustos personales han hecho de esta película una producción no demasiado llamativa -ni mucho menos mala-, en definitiva: no la vería por segunda vez (lo cual contradice mis expectativas sobre la película al ir a verla por primera vez: querer verla otra vez).