‘Escape’ no es la película que esperas cuando lees la sinopsis, y eso la hace redonda y aún más perfecta si cabe. Su director, Lee Jong-pil, nos acerca a una historia humana, individual, de supervivencia con la que todos podemos vernos identificados pese a no compartir ninguna circunstancia vital con el protagonista. ¿Cómo lo consigue? Construyendo una narrativa y personajes que avanzan con cada una de sus acciones persiguiendo un sueño. Con una meta así es imposible no verse reflejado en la película y ahí es donde reside su éxito y verdadero valor.
‘Escape’ narra el intento de deserción y persecución de Lim Gyu-nam, un soldado norcoreano que sueña con una vida en Corea del Sur, y Hyeon-sang, un oficial de Seguridad del Estado de Corea del Norte, que debe detenerlo.
‘Escape’ nada y todo tiene que ver con la zona desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur. Ciertamente el escenario es dramático y perfecto para poner de relieve una amalgama de sentimientos encontrados con los que encandilar al público, pero también es cierto que bien podría haberse hablado de las inquietudes del protagonista en otro entorno y paraje. La DMZ lo que hace es añadir dramatismo e intensidad a la historia, creando un thriller en el que sus personajes nunca descansan. Ofreciéndonos una historia de gato y ratón envuelta en un ambiente idílico lleno de peligros y obstáculos que superar.
Qué no te engañe el fresco verdor de los bosques y campos que atraviesan los protagonistas, lejos de ser paradisiacos y salvajes, como solo un paraje no habitado por humanos puede ser, esconde trampas y peligros que éstos deberan superar para lograr su meta. La intensidad de la puesta en escena nos deja sin aliento en más de una ocasión, pero compensa con paradas dramáticas que cambian de escenario de forma radical, haciéndonos ver que la dimensión del mundo de los protagonistas va mucho más allá del cuartel en el que cumplen su servicio militar.
Se introduce con ello esa dualidad tan clara y abrumadora en sociedades dictatoriales. Vamos de la oscuridad, el polvo y la miseria de los ciudadanos que lo dan todo por el régimen, invadidos por tanto miedo como sentimiento patriótico, hasta el lujo, color y abundancia de quienes se aprovechan del sistema jerárquico impuesto a través del abuso de poder. Es dificil encontrar las palabras correctas para todo lo que sentimos mientras se desarrolla la acción. Se trata de un mundo complejo, que por suerte no hemos experimentado, en el que nos encontramos con unos protagonistas dibujados con unas aristas que casi cortan, pero a los que abrazaríamos sin dudar, sintiéndonos contrariados por ello. Son las suyas unas construcciones muy humanas e imperfectas, que acompañadas de la interpretación perfecta, nos remueve, irremediablemente en más de una dirección.
Dos colosos para una historia de supervivencia
Poco podemos decir de la pareja protagonista de actores que no se haya dicho hasta la fecha. Se trata de dos de los mejores actores de su generación. Ambos con una fuerte presencia en pantalla y a un mismo tiempo con una capacidad enorme de mimetizarse con sus papeles y guiones, sorprendiéndonos siempre que aceptan un papel, sea el que sea. En ‘Escape’ Lee Je-hoon da vida a Lim Gyu-nam, un soldado norcoreano con más de diez años de servicio que sueña con una nueva vida en el sur. Una vida que el pueda definir, una vida en la que pueda haber cambio a mejor, en la que las decisiones tomadas sean suyas, y donde el miedo pase a ser incerditumbre bañada de esperanza por todo lo que queda por llegar, sea bueno o malo.
Vemos a Lee He-hoon en un papel de una tremenda fuerza, pero también despesperación. Hay escenas brutales en las que el protagonista pone su cuerpo y mente a prueba, sin ceder nunca ante la presión física y psicológica a la que es sometido. No hay muchos momentos para la paz y la felicidad plena en ‘Escape’, pero si para la esperanza, y el actor de ‘Chief Inspector 1958’ lo da todo en una historia sin descanso en la que la agudeza mental y la perspicacia son imprescindibles para la supervivencia.
Koo Kyo-hwan es un soldado de alto rango llamado Lee Hyun-sang, un oficial del departamento de Seguridad norcoreano que se presenta ante nosotros con una de las mejores introducciones para un personaje protagónico creadas en mucho tiempo. El aura que rodea al personaje es indescifrable. Nunca sabes bien por donde va a salir, que va a decir o como va a responder a los distintos estímulos que le rodean. Es meticuloso, delicado, brutal e impredecible. Este es ese antihéroe que podría tener su propia saga de películas, las cuales devorariamos ávidamente. La tensión y desconfianza ente ambos personajes puede cortarse con cuchillo, y puedo asegurar que no conseguirás relajarte en ningún momento.
Parte de culpa también la tienen la banda sonora y el montaje. Ambos excepcionales y de una alta calidad. La rapidez de las escenas y la complejidad técnica de las mismas, rodando en zonas muy vastas, arboladas y llenas de obstáculos, entrelazándose con soltura y naturalidad hace que quedes pegado a la pantalla volando los minutos, sin importar la cantidad de veces que la hayas visto antes.
Por su parte, unos secundarios de lujo terminan de cerrar un plantel de esos que no decepcionan en ningún minuto del metraje. Si ‘Escape’ participase en un concurso de miradas, ganaría en todas las categorías. Es espectacular ver como los protagonistas lo dicen todo con los ojos. La ferocidad de quien persigue lleno de contradicciones, la fortaleza de quien sobrevive en un medio inhóspito, la ilusión y miedo a lo desconocido de quien corre sin mirar atrás en pos de una vida mejor, y por supuesto, esa mirada llena de deseo, temor y rabia de quien tiene roto el corazón por un amor que nunca podrá ser en un sistema social lleno de prejuicios y muerte para todo aquel que no cumple con los cánones establecidos.
Deja ‘Escape’, además, notas sociológicas dificiles de encontrar en cualquier otra producción o lectura que tenga que ver con el tema fronterizo coreano. Verás dentro de la película grupos norcoreanas fuera de lo común, y aunque pudieran parecerte un añadido creativo al guion, aprovecho para contarte que tienen una base real en grupos sociales que han decidido vivir fuera del sistema dictatorial norcoreano, y que sobreviven como tribus, fuera del poder administrativo y político de Kim Jong-un.
Esta es una película que nos dice que correr sin mirar atrás, a veces, es lo más valiente que podemos hacer. ¿Conseguirá Lim Gyu-nam cruzar la frontera y tener una vida llena de dificiles retos que le hagan sentir que está vivo? Déjanos tus comentarios más abajo o en redes sociales, estamos deseando saber que te ha parecido esta historia escape.
Tráiler de ‘Escape’
¿nos encanta?
Overall
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Fotografía
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Interpretaciones
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Banda Sonora
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Edición y montaje
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Guion
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Originalidad