‘Mi primo’. Pierre (Vincent Lindon) es el consejero delegado de un gran grupo familiar. Cuando está a punto de firmar el trato del siglo, debe resolver una última formalidad: lograr la firma de su primo Adrien (François Damiens) quien posee el 50% de la empresa. Éste es un soñador idealista algo gafe que, sin embargo, está muy feliz de reencontrarse con Pierre y solo quiere pasar tiempo con él y retrasar la firma. Pierre no tendrá otra elección que embarcarse con su primo en un turbulento viaje de negocios donde su paciencia será seriamente puesta a prueba.
‘Mi primo’, el bueno de la película.
Comedias francesas de altísimo nivel las hay, muchas. Todas ellas suelen hacer equilibrio entre las situaciones disparatadas pero cotidianas y la ternura y lágrima fácil por el sentimentalismo, aunque suelen claudicar ante una metáfora sencilla que resulta de disfrutable reflexión por parte del público. Al fin y al cabo, con la etiqueta de comedia, todos esperamos pasar un buen rato y disfrutar de momentos que nos hagan sencillo el visionado y nos alejen un poco del estrés diario.
Este estrés es para Pierre en ‘Mi primo’. Un hombre de negocios serio y respetado que necesita la firma de un primo al que no ve hace años llamado Adrien y que, según el propio Pierre, está loco. Bien es cierto que Adrien no gasta muchos esfuerzos en demostrar lo contrario, pero sin duda, con ambos protagonistas y la relación entre ellos, ya tenemos los dos pilares perfectos para levantar los cimientos de una comedia sencilla, relajada y de sonrisa fácil.
El ritmo es clave.
El tema de ‘Mi primo’ es que, una película con tintes comédicos, aunque no sean tan disparatados como podría esperarse, necesita un ritmo que no se le ha otorgado. Cae en el error de rebajar su velocidad narrativa pasado el primer tramo de la cinta y se deja llevar por un corto espacio de explicaciones innecesarias y de minúsculas subtramas alargadas en demasía; no es un problema enorme, pero si que hace que decaiga el placer. Ese ritmo frenético de muchas de las comedias o al menos a un nivel más alto como invita el primer cuarto de hora de cinta no termina de fluir durante el resto del metraje, y es sorpresivo para el espectador.
Aun así, obviando la lentitud de ciertos instantes, la película cuenta con Vincent Lindon cuya carrera cinematográfica, basada en su mayoría en Francia, empezó por allá por los 90, y con François Damiens, los cuales son los grandes protagonistas de la película, los dos primos, quienes tienen todo el peso de la cinta. La química entre ellos si es latente y uno de los grandes puntos fuertes de la película. También tenemos en la misma a una Pascale Arbillot que se lleva buena parte de los momentos de comedia de la cinta y a Alix Poisson en una aceptable interpretación.
Por lo qué…
Por lo que ‘Mi primo’ es una comedia interesante, alargada en demasía en ciertos momentos y con un freno echado que quizás no debería, pero simpática y cordial, con una moraleja sencilla y unos pequeños detalles en el guion ensalzables. Sin lugar a dudas deja esa sonrisa en la boca que suele venir acompañando a las comedias francesas, y mantiene la trama con cierto interés hasta un desenlace previsible pero a la vez satisfactorio. ‘Mi primo’ es una elección que te hará pasarlo bien, que te hará pensar en relaciones familiares, en lo que es la locura y la cordura y en lo que de verdad es importante. El señor Kase.O lo ha dicho en un tema hace poquito: «Te pierdes lo bueno buscando el error, te pierdes lo mejor…». Disfruta de ‘Mi primo’.
Tráiler
¿Pasa el corte?
Overall
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Originalidad
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Fotografía
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Montaje y edición
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Música
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Guion
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Interpretaciones
User Review
( votes)Puntos fuertes
- La parte final de la película.
- Las cuatro interpretaciones principales y la química entre ellas.
- Hay una imagen de viñedos que me parece preciosa…
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