Después de un fin de semana en el que las películas de terror han sido protagonista, ‘Líbranos del mal’ es uno de los films que se encuentran ahora mismo en las grandes pantallas de este género.
El problema que tiene ‘Líbranos del mal’ es que ha intentado ser una película ambiciosa utilizando varios elementos que están a la orden del día: posesiones demoníacas, curas con pasado oculto, sectas, etc. Esto bien conjugado hubiera podido dar un producto muy potente pero no ha sido así, sino al contrario, se puede ver una especie de ‘tv movie’ como no: inspirada en hechos reales, con un melodrama personal de un cura con un pasado oscuro (como no), una persecución policial previsible y un pasado oscuro de los antagonistas demasiado forzado.
El guion contiene varios vacíos y errores, provocando un guion muy previsible y enrevesado de tal manera que no se llega a entender. El origen de los poseídos parece casi caído del cielo, sin un razonamiento sólido sino que se van cayendo según va pasando el metraje del film. La profundización de los personajes está con buenas intenciones e incluso, no son arquetipos pero están demasiado dramatizados: los buenos son demasiado buenos, incluso aunque quieran humanizarlo a través de sus problemas, lo que produce que no se perciba como real. El final del film es uno de los errores más grandes de ‘Líbranos del mal’, demasiado repentino, e incluso dando la percepción de haber sido terminado de esa manera porque no había mayor tiempo de preparación.
La presencia demoníaca aquí se destaca por una mezcla de sectas, traumas en el pasado lo que provoque que sea engorroso y difícil de entender y casi una excusa para poder dar unos cuantos sustos al espectador y no tanto para ahondar en el tema o justificarlo de manera coherente. El pasado oscuro del cura parece casi sacado de la manga por el director y para justificar la fe en Dios, nada creíble. Los asesinatos que se visualizan en el film son irrisorios en muchas ocasiones y creados exclusivamente para justificar errores del guion.
Las interpretaciones son bastante decentes. Eric Bana ha dado lo máximo y ha exprimido bastante su personaje, es la interpretación más sobresaliente de la película junto con Lulu Wilson, Christina la hija del policía, que pese a su corta edad es una de las pocas que se lleva la pantalla cuando sale en escena. Édgar Ramírez únicamente se puede decir que ha habido una buena ejecución pero nada destacable.
Los efectos especiales y la imagen están bastante cuidados y se podría decir que esto es lo mejor de la película dado que el ambiente oscuro, terrorífico e incluso, sucio y decadente está muy conseguido, la trama no acompaña pero audiovisualmente está muy bien hecha. Se puede decir que poco a poco el género de terror ha sabido establecer una nueva manera de utilizar los efectos a favor y sin ser totalmente necesarios sino dándolo en pequeñas dosis dando esa sensación de realismo que provoca escalofríos en el espectador.
En conclusión, ‘Líbranos del mal’ es una película que ha aprovechado el ‘basado en hechos reales’ para salir a la palestra y dar muy buenos números en cuanto a taquilla pero en trama es bastante floja. No termina de soldar los elementos que tiene y se queda en un producto en bruto con casi relación y forjándolas de manera forzada y sin ningún tipo de naturalidad. Mezcla de género de terror, drama y acción que no ha salido bien y crea un producto sobrecargado que no termina de definirse. Pudo ser un buen film de terror pero se quedó en ello. Recomendable para ver una noche de Halloween en la que abunden las películas de miedo de todo tipo.
