Título original: Joy
Año: 2015 (Estados Unidos)
Duración: 124 min.
Director: David O. Russell
Reparto: Jennifer Lawrence, Robert De Niro, Bradley Cooper, Isabella Rossellini, Diane Ladd, Édgar Ramírez, Virginia Madsen, Elisabeth Röhm, Dascha Polanco, Jimmy Jean-Louis, Madison Wolfe
Guión: David O. Russell, Annie Mumolo
Fotografía: Linus Sandgren
Música: David Campbell, West Dylan Thordson
Género: Comedia. Drama. Biográfico. Trabajo/empleo
Sinopsis: Joy Mangano, una humilde trabajadora de Long Island, acabó convirtiéndose en una popular inventora de productos del hogar y también en uno de los rostros más conocidos de la teletienda americana.
Crítica de ‘Joy’
por Marta Pedraza
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«Solo ella»
David O. Russell vuelve a traernos a Jennifer Lawrence, y solo a ella. No importa que otros muchos nombres aparezcan en los créditos, Lawrence es el centro de atención, no lo es Joy Mangano y claramente no lo son el resto del reparto. Esto es lo primero que debemos tener en cuenta antes y después de ver el film, porque sin esta premisa quedaremos decepcionados, y mucho. Puede que lo que se presentase en un primer momento ante el director fuese un biopic, pero como bien ha dicho en numerosas entrevistas, no era su intención crear uno, al menos no al uso, y eso es lo que ha hecho, ha hablado de Joy Mangano, ha contado su historia, pero la ha amoldado a los parámetros de Jennifer Lawrence en cada plano, en cada toma. Es una especia de oda, no muy perfecta, a la actriz que los ha sacado a ambos, o al menos a él del oscuro pozo de las decepciones del mundo del cine (no todas las excentricidades son siempre bien vistas en la Meca del cine, no todos son Tim Burton, y no todos corren la misma suerte). Teniendo esto último presente, Joy es una película para disfrutar, para disfrutar única y exclusivamente de la protagonista, de la luz cálida que siempre la rodea, y de una banda sonora tan cambiante como las situaciones y emociones que le vemos superar.
Todo aquel que quiera ver ‘Joy’, y quiera disfrutarla debe esperar encontrar un sinfín de situaciones en las que te levantarías de la butaca y golpearías a algunos de los personajes que aparecen. La familia es un apoyo constante en nuestras vidas, pero a veces ese apoyo pesa tanto que hunde, y de ello es claro ejemplo la familia de Joy Mangano, que en la película ahoga a la par que intenta ayudar, y esa situación es ni más ni menos que el reflejo de la mitad de las familias, esas de verdad, no de las de cuento de hadas, ahí esta el biopic. No hablamos de un personaje al que se le ocurriese una genial idea y fuese apoyada por familia, bancos y amigos, vemos a una persona, a una mujer cuya vida es la casa, no el hogar, la casa. Su trabajo (auto impuesto por las circunstancias) es limpiar, arreglar y preparar comida, nada más, y eso es lo que la hace tan especial, y es algo que se refleja muy bien en la película. Lo tedioso y amargo de una vida confinada a cuatro paredes, que terminan siendo tu prisión, en cuya celda no solo tienes que cuidar de ti mismo, sino de otras siete personas que esperan de ti mucho más de lo que deberías humanamente dar.
‘Joy’ no es esa película perfecta de tomas increíbles, aunque si tiene un par de ellas que se quedan contigo tras la película, la nieve siempre da mucho juego en ese aspecto. Es un largometraje de sensaciones y emociones, en el que la angustia y la obstinación ganan la batalla, y de la que Jennifer Lawrence sale muy airosa. Se expone a la cámara de forma frontal, sin una batalla de fondo por salvar a la humanidad que la llene de ruido y la haga perderse en él. Aquí la única lucha es consigo misma, intentando transmitir la pasión, el miedo, las ganas de una vida mejor y la superación. Si bien es cierto que la primera, la pasión, no tiene la fuerza que debería, el resto de emociones, sin lugar a dudas, llega a nosotros.
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5/10
Resumen
Lo mejor: Una Jennifer Lawrence como nunca antes.
Lo peor: Los secundarios que ojalá no apareciesen en pantalla.