Crítica de ‘Blood Father’ (2016, Jean-François Richet)

blood-father-magazinemaTítulo original: Blood Father

Año: 2016 (Estados Unidos)

Duración: 88 min.

Director: Jean-François Richet

Reparto: Mel Gibson, Elisabeth Röhm, William H. Macy, Diego Luna, Thomas Mann, Erin Moriarty, Ryan Dorsey, Michael Parks, Dale Dickey, Richard Cabral, Raoul Trujillo, Daniel Moncada

Guión: Peter Craig, Andrea Berloff

Fotografía:Robert Gantz

Música: Sven Faulconer

Género: Acción

Sinopsis: Lydia, una joven de 16 años, es acusada de haber robado una fortuna a un cartel, pero en realidad es una trampa fraguada por su novio traficante. La chica tiene que escapar con el único aliado que tiene en el mundo: su padre, John Link, un eterno fracasado, antiguo motero rebelde y ex presidiario, que se verá en la obligación de vincularse nuevamente con un pasado del que huía para poder salvarla a ella.

Crítica de ‘Blood Father’

por Marc Segura Arasa

«Gibson y todo lo demás«

«Mi vida ha terminado. Estoy jodido…”, «El alcoholismo es algo que corre en mi familia. Es algo que está cerca de mí. La gente se recupera de ello, es un milagro.», son declaraciones reales del propio Mel Gibson tras una turbulenta trayectoria personal repleta de altercados y arrestos que parecían haber abocado al actor a un declive previamente anunciado. Es por ello que Jean-François Richet (‘Asalto al distrito 13’) no podría haber elegido mejor al protagonista de ‘Blood Father’, un notable thriller de acción hecho a la medida del polémico actor estadounidense.

John Link es un fracasado exalcohólico y expresidiario que intentará proteger a su hija de un grupo de traficantes. Richet ha transformado al tipo duro que Gibson fue en un héroe más cercano a lo terrenal, dejando de lado las historias entretenidamente inverosímiles para ofrecernos una cinta más seria, sólida y con un ritmo que la hacen disfrutable de principio a fin. Puede que sea el paso de los años evocado por unas duras facciones, el reflejo de su convulsa vida personal, la barba y el look de matón o todo ello a la vez, pero sea como sea Gibson lleva todo el peso de la película convirtiendo lo que hubiera sido una cinta del montón en un más que digno largometraje.

‘Blood father’ no es sólo su protagonista, le acompañan una desconocida Elisabeth Röhm cuya positiva aportación consigue no restar calidad al conjunto, también un argumento sin ninguna novedad que se ve compensado por un guion de ritmo constante evitando de manera inteligente la sobredosis de acción. Sabes cómo se desarrollará la historia, intuyes el rol de los personajes, difícilmente encontrarás nada que te sorprenda, aun así te dejas llevar fácilmente por sus menos de 90 minutos y al llegar a los créditos finales te sientes gratamente satisfecho.

 
  • 7/10
    Realización - 7/10
  • 6.5/10
    Fotografía - 6.5/10
  • 6.5/10
    Montaje y edición - 6.5/10
  • 6/10
    Música - 6/10
  • 6.5/10
    Guion - 6.5/10
  • 7.5/10
    Interpretaciones - 7.5/10
6.7/10

Resumen

Lo mejor: Mel Gibson y el buen ritmo de la película.
Lo peor: Un argumento poco original.

Tráiler de ‘Blood Father

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *