‘The Defenders’: la unión hace la fuerza

«Vosotros cuatro: el Diablo de Hell’s Kitchen, la detective sabionda, el ex-convicto honrado y el chico del puño brillante.
La guerra por Nueva York se librará aquí.»

‘The Defenders’ llegó a las pantallas de la misma manera que lo hizo en su día ‘Jessica Jones’ o ‘Daredevil’: con cierto escepticismo y con una propuesta potencialmente atractiva. Dicha propuesta no era otra que la unión de los cuatro protagonistas que consiguieron con sus series en solitario alimentar las ganas de fans y seguidores para poder verlos de nuevo en la gran pantalla; y si es juntos muchísimo mejor. ¿Por qué mucho mejor? Por que podríamos llegar con ello a evitar las carencias que, en solitario, si que poseían en ciertos aspectos esas series: La de Jessica Jones y el Diablo de Hell’s Kitchen no tienen mucho que reprochar, la verdad, pero si bien el listón se vino un poco abajo con ‘Luke Cage’, con la llegada de ‘Iron Fist’ golpeó el suelo estrepitosamente.

La unión hace la fuerza

Y esa fuerza la encontramos. Si por solitario cada personaje era un amalgama de dudas internas, decisiones difíciles, luchas consigo mismo y problemas más allá del héroe, la mezcla de los cuatro no ha hecho otra cosa que reforzar dichos elementos, añadiendo además el plus de las relaciones interpersonales entre ellos mismos. Murdock sigue sin saber muy bien que hacer con el traje de diablo; Jessica no deja de ser esa Jessica que volvió locos a propios y extraños, amigos y enemigos; Luke Cage es un tipo honrado con unas ganas aun más grandes que él mismo por hacer el bien y el señor Rand, bueno… no deja de buscar una venganza light y de desear eliminar el conflicto interno de sus tradiciones ancestrales y su nueva forma de vida.

Ahora bien, la amistad, compañerismo y ciertas tensiones entre ellos cuatro consiguen trasladar la presión del protagonista a cuatro miembros, los cuales han conseguido complementarse para crear un equipo en el que las carencias que comentábamos antes quedan escondidas por las virtudes individuales. Así pues, a la falta de gracia momentánea que Iron Fist posee le acompaña un comentario de Jessica Jones que no pasará inadvertido, y a la razón más lógica que utilice Daredevil le responderá Luke Cage con una frase para sentenciar. Separados somos fuertes, juntos invencibles (no recuerdo muy bien quien dijo esto).

El color

Si, merece más que una mención el uso del color en la serie. Las transiciones que, principalmente se observan en los primeros capítulos, nos dejan una muestra clara de la importancia cromática. Bien es sabido que cada protagonista tiene asociado un color que pudimos ir viendo a lo largo de sus series en solitario; así pues Jessica Jones está asociada al morado; Daredevil al rojo (magnífica intro donde este color está utilizado de manera impecable), Luke Cage es el amarillo e Iron Fist está representado por una especie de amarillo/verdoso. Esto nos llevará a ir observando en la serie, en los momentos en los cuales los héroes se encuentran solos, un ambiente algo más recargado de esta tonalidad haciendo clara referencia al protagonista con el cual vamos a disfrutar. No deja de ser un recurso, pero está utilizado de manera excepcional.

«La Mano» va teniendo una razón de ser

Por muy ancestral que fuese «La Mano», esa sociedad tan antigua y poderosa, no había sido explicada como debiera hasta la llegada de ‘The Defenders’. Ya se nombró en la primera de ‘Daredevil’ y se ha visto pelear a un Danny Rand de manera incansable contra ella, pero ha tenido que llegar Alexandra para que le encontremos un sentido.

«La Mano» es una sociedad completísima, con miles de activos adiestrados de manera maestra en el arte del Ninjitsu, con recursos casi ilimitados y con mucha ambición para hacerse con todo lo que se les ponga por delante. A pesar de que no se conoce exactamente los datos de su nacimiento como tal, se sabe que su gran fortaleza con el paso del tiempo se debe a la magia negra y a la posibilidad de resucitar a los muertos, lo que hace que sus guerreros pierdan el miedo y sus filas se mantengan siempre plagadas de activos dispuestos a darlo todo, debido además a la posibilidad de lavarles el cerebro durante el proceso de resurrección. «La Mano» está en el crimen organizado, en la trata, las drogas, la especulación… está en todo, por que puede estarlo, y controla desde tiempos inmemoriales muchísimos de los aspectos cotidianos.

Madame Gao y Bakuto aparecen bajo el mandato de Alexandra. Estos constituyen tres de los cinco dedos de «La Mano», por lo que únicamente faltarían por nombrar Sowande y Murakami.

Los secundarios

No hay serie que se precie sin que unos secundarios de calidad la apoyen. Más que apoyarla, los secundarios de ‘The Defenders’ demuestran que Marvel cuida muy mucho de todos los personajes que aparecen en su nómina, dándoles a los mismos importantes papeles y actos que tienen una repercusión en el universo de la factoría.

En ‘The Defenders’ no es para menos, y si creíamos que Claire Temple, la enfermera encargada de sanar a absolutamente todos los héroes que se encuentra a su paso era el nexo que tenían en común entre ellos, nos dejamos mucho por ver. Aparecen Karen Page y Foggy, el amigo de universidad de Daredevil, que a su vez es el abogado de Luke Cage, cuya jefa es «amiga» de Iron Fist y «clienta» de Jessica Jones. La samurái Colleen Wing no deja de acompañar a Danny Rand; Misty Knight vuelve a aparecer, no falta Elektra y ni siquiera nos quedamos sin Patricia Walker (que creemos ganará importancia) o Malcolm. ¡Hasta el cura de ‘Daredevil’! Una lista impresionante de miembros que no hacen otra cosa que enriquecer a la propia serie.

Sacando pegas…

¡Eh, eh, eh! ¡Pues a mi Iron Fist no me está pareciendo tan malo! A ver, bien es cierto que los otros tres pueden tener cierto grado de carisma superior, pero el chaval ha mejorado muchísimo de su serie en solitario. A pesar de que la gente lo odie, pero a mi no me parece ni mucho menos un personaje que sobre. Así que una vez dicho esto, os dejo mis notas, y espero que os paséis por la guía completa de series y películas de Marvel.