‘Roadies’ es una buenísima banda sonora en una serie. Ese, bien podría ser el resumen del salto a la pequeña pantalla de Cameron Crowe, quien deslumbra con la música escogida, pero no llega a cuajar todo lo que sucede a su alrededor.
La trama nos presenta a un equipo de trabajadores que se encarga de hacer que un concierto de rock tome vida cada noche que el espectáculo se traslada a una nueva ciudad, de ahí su nombre, ‘Roadies’, debido a la cantidad de km. en avanzada del grupo para que todo esté listo a su llegada.
A pesar de un casting que no llega a estar mal del todo, y que tiene unos personajes que podrían tener una vida espectacular, no disfrutamos nunca de ellos plenamente, pues quedan verdaderamente planos. No es culpa de la cantidad de «protagonistas» sino de la calidad del guión que es más que baja, ya que todo transcurre demasiado lento y las situaciones son extravagantes hasta decir basta.
Se nos intenta vender la idea de que los personajes son muy variados e incomprendidos dentro de la sociedad que los acoge, siendo el único sitio en el que encajan su «familia/compañeros de trabajo», pero la verdad es que los personajes no cuadran en ningún sitio, pues ni se aguantan entre ellos, ni se conocen, a pesar de que deberían, y lo más importante de todo, no hay compenetración entre ellos. Se limitan a existir y ser. Las miradas que lo dicen todo y los diálogos que se quedan contigo semana tras semana se quedaron en otro show que no es ‘Roadies’.
Entre los protagonistas que deberían guiarnos por la serie nos encontramos con un Luke Wilson que no consigue ubicarse ante la cámara, y en este caso no se trata de su interpretación, sino de lo poco pensado que está el personaje al que da vida, Bill, el manager del tour, a quien le falta vitalidad y no consigue llegar a ninguno de los componentes de la gira. Acompañándolo en esta tarea está Shelli, interpretada por Carla Gugino, la manager de producción, quién está más ausente que presente y cuyo personaje podría ser carismático y enigmático a un mismo tiempo, pero que peca de plano.
Junto a ambos aparecen nombres como Imogen Poots, quien en el primer capítulo nos atrapa, pero rápidamente nos deja ir al perderse el primer impacto.
Algo bueno tiene que tener ‘Roadies’ para haber salido en las listas de series más esperadas, ¿no?, por supuesto. Como hemos comentado nada más empezar, la música es clave, legendaria, y las actuaciones de los músicos que aparecen en escena son lo que más disfrutarás. La pasión con la que se vive la música es lo que hace que aguantes el tirón en los primeros capítulos, aunque probablemente no sea suficiente para mantener a los espectadores durante mucho tiempo.
Entre los temas más clásicos que hemos oído se encuentran ‘Given to Fly’ de Pearl Jam, ‘Loudmouth’ de Ramones, junto a canciones de la banda The Head and the Heart.
En definitiva, ‘Roadies’ no compensa la hora que te mantiene delante de la pantalla, pues son 60 min de capítulo que bien podríamos pasar disfrutando de conciertos en directo en Youtube o en cualquier otro medio mientras simplemente descansamos o realizamos alguna tarea que seguro nos llenará más que este intento de mostrar lo que nunca antes se había mostrado en TV. Tendremos que seguir esperando.
https://www.youtube.com/watch?v=bpcn9G7sj5w