Si eres amante de los diseños de vestuario que te dejan boquiabierta, de las historias de época y de los líos de corte, estás de suerte, porque ‘Las Amistades Peligrosas’ viene para sumarse a ‘The Great‘ para darnos calidad en abundancia en todo lo que respecta al apartado de maquillaje, vestuario y escenarios. No es sorpresa para nosotras que Lionsgate+ nos ofrezca productos de calidad absoluta en el apartado técnico, pero aquí vamos a tener mucha tela donde cortar, y no es para menos, la reina del diseño de vestuario, Andrea Flesch es la encargada de darle forma a las sedas y joyas que nos deslumbran en cada escena.
‘Las amistades peligrosas’ es un atrevido preludio de la clásica novela de Laclos del siglo XVIII que se centra en la historia del origen de cómo sus icónicos personajes, la marquesa de Merteuil y el vizconde de Valmont, se conocieron como jóvenes amantes apasionados en París en vísperas de la revolución. Esta versión moderna de una historia clásica lleva al público a través del asombro y el terror, la belleza y la decadencia, la seducción y el engaño en el París prerrevolucionario. Impulsados a corregir los errores de su pasado, la supervivencia de la joven pareja depende de sus habilidades de seducción y manipulación no sólo de la nobleza francesa, sino también con el otro. Alice Englert y Nicholas Denton interpretan a los famosos amantes: Camille -que es acogida por la actual marquesa de Merteuil (interpretada por Lesley Manville)- navega por su propio camino en un mundo de hombres, utilizando el poder de los secretos para recuperar el control; y Valmont, que no se detendrá ante nada para recuperar el título que le fue arrebatado recientemente. Su historia de amor intermitente es el corazón de la serie. Pero no es amor… Es la guerra.
¿No caes en quien es Andrea Flesch? Deja que te refresque la memoria. Andrea Flesch conocida por sus trabajos en ‘Midsommar‘ (2019), ‘Open Grave‘ (2013) and ‘Colette‘ (2018) es una diseñadora de vestuario afincada en Budapest que entre otros ha estado nominada a premios tan prestigiosos como los ‘British Independent Film Awards’ o los ‘Satellite Awards’.
Y ahora que ya sabes que te quedarás embobada viendo ‘Las amistades peligrosas’ por mucho más que el enorme erotismo que destila su guion, vamos a descubrir lo mucho que nos ha contado sobre este proyecto en el que han participado más de una decena de costureras.
Comenzamos.
Marta: Bienvenida, Andrea. Muchas gracias por sacar un hueco para atendernos, estoy muy emocionada de poder hablar contigo.
Andrea Flesch: Gracias a ti por el recibimiento.
Marta: Cómo siempre, espectacular todo el trabajo de diseño de vestuario. ¿De donde has tomado inspiración?
Andrea Flesch: Del siglo XVIII es fácil obtener inspiración. Hay cantidades de obras de arte que muestran los trajes de la época. Es un cuento de hadas para diseñadores.
Marta: Estamos hablando de un París prerrevolucionario… lo hemos visto en películas, leído en novelas. ¿Te ayudas también del cine para diseñar?
Andrea Flesch: Prefiero no mirar películas para esto, creo que desviaría mi atención, por eso siempre me voy a pintura de la época ya que en ellas vemos reflejadas de primera mano como era la vida. Además, de ésta época también podemos encontrar vestuario original en museos. Así que en su mayor parte he estado visitando, de forma online, museos y libros.
Marta: No es la primera vez que te toca diseñar vestuario de época. Todos recordamos el magnífico trabajo que hiciste en ‘Colette’ y que también has hecho en otros productos televisivos antes. ¿Con qué periodo dirías te sientes más cómoda trabajando?
Andrea Flesch: ‘Colette’ fue maravillosa. Pero no podría decantarme por ninguno de los dos periodos, porque ambos son magníficos y te dan la oportunidad de jugar y no hablemos ya de los tejidos y sus infinitas posibilidades…
Marta: ¿Cuál crees entonces que sería la parte más compleja del proceso creativo?
Andrea Flesch: Lo más difícil es encontrar los tejidos, porque quieres crear el vestuario con materiales auténticos, pero incluso si compras seda a día de hoy, no es de la misma calidad que antes. Los colores tampoco son iguales, así que no sabría decirte exactamente cuánto tiempo he tardado, pero mucho, para que todo fuese como debería. Otra cosa que hay que tener en cuenta es el tiempo que se tarda en recrear un vestido de esta época. Se puede tardar días, porque primero tienes que hacerlo con una tela secundaria, antes de utilizar la tela especial que has buscado durante semanas. Un vestido puede llevarse entre 12 0 15 metros de seda así que… lleva demasiado tiempo.
Marta: Ha tenido que ser un trabajo ingente, porque de entrada ya vemos a muchísimos personajes en las escenas y por supuesto vemos una gran cantidad de cambios de vestuario en los protagonistas. Ha tenido que ser un trabajazo enorme. ¿Cuánta gente has tenido que coordinar para poder tenerlo todo listo a tiempo?
Andrea Flesch: Alrededor de unas 15 personas en el taller, pero podríamos haber sido unas cuantas más… jejejejeje… Creo que hicimos unos 140 trajes. Camille tenía 40 cambios de vestuario.
Marta: ¡Qué barbaridad! Creo que no he visto aún suficientes episodios para ver esa cantidad de trajes todavía… Una pregunta algo más personal, ¿Qué prenda de aquellos días echas de menos hoy?
Andrea Flesch: Ummm… Me gustan muchísimo las enaguas, y desde que he hecho esta película creo que me encantaría usarlas junto a las faldas, añadiendo una pequeña chaqueta al conjunto… y también me encantan los sombreros de esa época.
Marta: ¿Cuál es la prenda que no echas nada de menos? Yo creo que serían los corsés, pero estoy segura de que no sería la única prenda incómoda que se llevase en la época.
Andrea Flesch: Sin lugar a dudas diría corsés, pero lo curioso es escuchar a las actrices, quienes decían que al principio era muy incómodo llevarlos, pero que cuando se acostumbraron, veían su postura mejorada. Aún así no creo que sea bueno llevar uno.
Marta: Otra curiosidad que tengo es saber sobre la joyería. ¿Estás al cargo también de su elección y diseño? Hay unos collares que cortan la respiración…¿Cómo se consigue algo así?
Andrea Flesch: Si, también me encargo de esa parte. Es fascinante si supieras la cantidad de negocios que se dedican a esto. Se pueden alquilar y también te las hacen si diseñas un pedido. Es sorprendente la cantidad de artesanos que trabajan en el conjunto global de un proyecto de estas características y dimensiones. Piensa que se necesitan profesionales que hagan sombreros, guantes, zapatos… incluso los calcetines se hacen expresamente para la producción.
Marta: No me extraña que nos enganchemos tanto a este tipo de producciones. Solo hay que ver el cuidado que se le pone a todos los detalles, y eso es algo que no siempre vemos en televisión. Aquí te atrae el maquillaje, el vestuario, las localizaciones y eso es lo que verdaderamente te engancha...
Y ya la última pregunta. ¿Te has permitido el lujo de dar toques de modernidad a las creaciones?
Andrea Flesch: Siempre lo hago, pero de forma muy modesta porque me gusta demasiado la versión original. Siempre se acaba dando algún toque de modernidad porque no quieres solo copiar algo, pero luchas en todo momento por mantener la esencia y por eso los materiales son siempre reales, como la seda. Todo es como era y solo haces pequeños cambios que se ajusten al gusto o a la historia, depende mucho de la producción.
Marta: Muchísimas gracias por contestar a nuestras preguntas. Sin lugar a dudas estaremos, más atentos si cabe al vestuario mientras vemos la serie gracias a todo lo que nos has desvelado sobre el trabajo que hay tras su creación.
Andrea Flesch: Muchas gracias a ti.