En un periodo de relativa calma, los personajes se enfrentan al resurgimiento del mal en la Tierra Media. Desde las profundidades más oscuras de las Montañas Nubladas hasta los majestuosos bosques de Lindon, el impresionante reino insular de Númenor y los confines más lejanos del mapa, estos reinos y personajes esculpirán legados que perdurarán en el tiempo. Serie de TV basada en los libros de J.R.R. Tolkien, ambientada en la Tierra Media, y que explora nuevas líneas argumentales en una época muy anterior a “La comunidad del anillo”.
Último capítulo de ‘Los Anillos de Poder’. Años hemos esperado este preciso instante, el finalizar de la primera temporada de Amazon Prime, y lo han hecho con broche de oro.
Presenciamos tres tramas en este episodio, la de Númenor, que tiene muy poca presencia y relevancia, comparada con las otras dos tramas. Tenemos a los pelosos, la más emotiva, la que más juega con nuestros sentimientos. Y la parte de Galadriel y Halbrand, sin duda la mejor, y sin duda, lo mejor de la serie hasta el momento.
En Númenor, con Elendil y compañía nos presentan el porvenir de la segunda temporada. La hija de Elendil, Eärien, será reina, según las palabras del moribundo rey de los hombres. Entonces, ¿qué pasará con la reina regente Míriel? Lo más probable es que la releven de su puesto, con la muerte de su padre y el problema de su ceguera, seguir siendo la gobernante de Númenor no parece una opción viable. Elendil, por otro lado, nos deja una escena plagada de ira, pero sobre todo, de esperanza; acepta la supuesta muerte de su hijo Isildur, y decide vengarlo, comandando el futuro ejército de Númenor que cabalgará por las llanuras de la Tierra Media cazando a los odiados orcos.
Por fin descubrimos quien es el misterioso hombre del meteorito, capítulos atrás ideamos una teoría de que podría ser Gandalf, por sus poderes, por su conexión con los pelosos, y sobre todo por un pequeño detalle visible cuando el hombre toma en su mano un insecto y le susurra palabras misteriosas, escena que ya observamos en la trilogía de ‘El Señor de los Anillos’ por parte del mago gris. Aquí nos lo confirma la elfa, aliada de Sauron que viste de blanco, dejándonos la sorpresa descubierta cuando menciona que el hombre es un “Istar”, uno de los cinco magos que enviaron a la Tierra Media para combatir el mal del Señor Oscuro. Esta parte del capítulo es preciosa y emocionante, siempre fue durante la temporada la parte más lenta, quizá la que más indiferencia causaba, pero la espera ha valido la pena por tan solo poder observar lo que ocurre en este episodio tan mágico. Es imposible no emocionarse con la despedida de Nori, o incluso con la muerte del simpático de Sadoc. Es imposible que tu piel no se ponga de gallina, al observar a Gandalf con Nori, dispuestos a partir en la primera gran aventura que tendrá el mago gris.
Y llegamos a la mejor parte, Galadriel sospecha de Halbrand, así que lo investiga en los pergaminos portadores de conocimientos que poseen los elfos. Entonces lo sabe, sabe que Halbrand no es ningún rey del sur, lo sabe; sabe que por su culpa Sauron ha vuelto, y con más poder que nunca. Pero es demasiado tarde. Es fabuloso y está perfectamente hilado la relación entre estos dos personajes, Galadriel y Sauron, un giro de guion perfectamente planificado, que deja una sensación apasionante, porque, sabemos lo que se viene para la segunda temporada.
Ese final, con los tres anillos de los elfos forjados, es simplemente perfecta. Ese guion entre Galadriel y Halbrand en la barca, con esa visión en el reflejo del agua, donde vemos a Sauron junto a su reina, pone la piel de gallina. ‘Los Anillos de Poder’ quizá no ha conseguido crear una temporada ideal para todo lo que se esperaba de este proyecto, pero sin duda nos deja con un final de temporada más que digno, un último capítulo que sin duda, perdurará en las memorias.