La cadena británica Itv intenta con esta miniserie de 8 episodios dar un repaso completo a la vida de una de las reinas más influyentes que haya dado la historia inglesa. La serie nos lleva paso a paso a través de los hitos más relevantes en los 60 años que duró su reinado.
Como actriz protagonista nos encontramos a la joven Jenna Coleman, quien ha sido antes vista en ‘Doctor Who’, realizando uno de los papeles más complejos a los que quizá haga frente, ya que encarnar un papel de este tipo conlleva siempre una gran cantidad de críticas, no ya tanto por la actuación sino por la gran cantidad de fallos históricos en los que incurre. Como suele decirse, la realidad siempre supera la ficción, y a veces parece nos da miedo adentrarnos en ella, por el simple hecho de no saber lidiar con lo que nos vamos a encontrar en nuestro pasado histórico.
‘Victoria’ se presenta con una elegancia y recreación teatral impresionantes, algo a lo que nos tienen acostumbrados los ingleses. Todos echamos de menos ‘Downton Abbey’, y esta serie nos hace estar un poco más cerca de ella debido a las formas y su delicadeza.
Por otra parte son muchas las acciones que podemos reprochar, como por ejemplo su intento, vano, de darnos a conocer la verdadera vida de palacio. Suponemos es más complejo cuando se trata solo de unos pocos episodios como es aquí el caso, pero si de verdad queremos entender la naturaleza de este monarca, debemos ser capaces de empatizar con su entorno, de conocerlo, como ella lo conoce, y eso no ocurre en ningún momento.
El uso de realidades contrastadas con documentos históricos intenta ser grande, pero los productores, en fan de conseguir embelesar al público se han olvidado de que esta reina escribió una gran cantidad de notas y entradas de diario, que fueron a su vez publicadas ya en la época. Un buen material que podría haberse utilizado de forma más general, para aportar ese toque de verismo que nos llama la atención. No ayuda tampoco lo «correcto» de las formas en todo momento, ni la impasibilidad de todos y cada uno de los rostros de palacio.
Pese a todo esto, engancha, porque su cuidada fotografía, a pesar de ciertas recreaciones a ordenador que se ven a leguas, su luz y su ambientación, por no mencionar su trabajo en cuanto a vestimenta (sea mas o menos veraz) están muy cuidadas. Tiene la delicadeza y elegancia que nos encanta ver en las recreaciones de época.
Si estás dudando, debes darle una oportunidad, porque seguro apreciarás muchos de sus aspectos positivos, y pondrá un matiz diferente a algunas de tus noches.