La BBC no deja de sorprendernos, y si hay algún excéptico en la sala solo tiene que ir en los próximos días a la plataforma Filmin y atreverse con ‘The Living and the Dead’. Utilizo la palabra atreverse porque la serie es para valientes, para esos que no se acongojan con facilidad. ¿Es una serie de terror? No como tal, no tiene esa necesidad de hacer pasar un mal rato al espectador, pero consigue tenernos al borde del sofá todo el capítulo y seguro que algún que otro escalofrío recorrerá tu cuerpo.
Como todo lo que crea la BBC, la factura es exquisita. Para aquellos que echamos de menos ‘Downton Abbey’, este aspecto nos recordará a ella junto a algunos más. Escenarios y localizaciones son de 10, todo está donde debería y su luz crea una atmósfera perfecta a cada escena. Es algo complejo ambientar una serie basada en el siglo XIX, y más si tiene una temática de ultratumba tan acentuada como esta, pero lo mencionado, supera con creces nuestras expectativas.
Si no has visto o leído nada de ella hasta ahora te sorprenderá su intro, la cual nos hace recordar ‘Salem’ desde el primer segundo, aunque esta serie es mucho menos gráfica y explícita. Ya hemos mencionado que está ambientada en pleno siglo XIX, lo que no habíamos dicho es que se centra en los terrenos de una villa en la que la casa de los señores es el eje principal de acción, abriéndose a los campos de cultivo y al intento de una joven pareja de evitar que la herencia familiar desaparezca.
La pareja está formada por Nathan y Charlotte Appleby (arriba en la imagen), interpretados por Colin Morgan y Charlotte Spencer, Morgan seguro te suena si has visto la serie ‘Merlin’, y Charlotte si has visto la película ‘Los Miserables’. No son actores de renombre aún, pero no lo necesitan para hacer un trabajo muy serio en esta serie donde se enfrentan a situaciones paranormales a la par que lidian con el trajín diario de una Inglaterra rural bastante cerrada en cuanto a mentalidad se refiere. Los personajes secundarios adornan la escena y nos hacen adentrarnos en la campiña inglesa desde el primer momento, a veces casi se nos olvida que hay una trama paralela a todo esto mundo con un toque paranormal, por lo que se hace mucho menos pesada en ese aspecto, ya que nos deja respirar.
La trama se centrará en eso, en el transcurso de sus vidas cuando estas toman un camino inesperado donde el pasado y el presente se funden a través de los personajes secundarios de una forma un tanto peculiar. El desarrollo de los personajes es bastante plano a excepción del principal, el realizado por Colin Morgan, y la serie tiene lo suficiente de cada uno de sus ingredientes para no cansarnos y hacernos seguir viendo un capitulo tras otro, ya que si algo sabe hacer bien es engancharnos y hacernos querer más gracias a unos muy buenos cierres de capítulo que te deja con ganas de más y más. Dicen que la curiosidad mató al gato, pero desde el sofá de casa podemos permitírnoslo, sin temor a que nada ocurra, así que, ¿Por qué no ver un capitulo más?
Resumen
Lo mejor: La preciosa fotografía y su buenísima cinematografía
Lo peor: Terminas cada capítulo con una extraña sensación de desasosiego