'My military valentine', la ciudad de la paz (Viki, 2024)

‘My military valentine’ tiene una cantidad de ideas buenas que explotar, aunque no consigue llegar a todas ellas de forma certera o acertada. No todos los días tienes la suerte de jugar con una trama que permita hablar de las dificultades y sueños que se darían en la vida de los ciudadanos coreanos tras una reunificación del territorio, aunque solo sea como experimento previo en una sola ciudad. Desde los (des)encuentros entre familiares, el descubrir de nuevos sueños y la infinidad de escenas divertidas, lacrimógenas y ensoñadoras que podrían darse al descubrir las diferencias y similitudes entre norte y sur.

Tras décadas de tensión, la paz ha llegado a la península de Corea. Para marcar el inicio de la nueva paz intercoreana, la estrella top surcoreana Lloyd se dirige a la DMZ para realizar un concierto, pero un malentendido hace que la soldado de las fuerzas especiales norcoreanas Baek Yeong Ok tenga que intervenir. Los fans capturan su interacción, y el público lo interpreta como un momento romántico. Estalla así un escándalo y los fans de Lloyd se indignan. En su desesperación, se une al ejército… solo para encontrarse en una unidad liderada por Yeong Ok. ¿Podría surgir el romance entre esta pareja improbable?

El brillo de emoción en los ojos de la protagonista podría ser el de cualquiera de nosotras al pisar Seúl por vez primera, pero, por desgracia, no consigue sacudirse el tufo a trama machista a pesar de contar con una protagonista femenina con enorme potencial. Su historia, es, además de predecible, inconsistente en las acciones de sus personajes y tiene una falta de narrativa sustanciosa aun teniendo entre manos una muy buena idea para ofrecer un eje narrativo interesante del que se podría haber sacado oro.

Lo mejor de la serie es que es de esas cortitas, que te puedes poner para distraerte porque juega con todos los clichés del mundo mundial, no habiendo necesidad de pensar en nada mientras se está viendo. Solo hay que no dejarse enfadar por lo mucho que podría haber ganado este romance si se hubiese estructurado con seriedad su historia o si se hubiesen atrevido a darle un giro al guion añadiéndole dramatismo y osadía a las relaciones de la protagonista con los personajes de su entorno.

Los protagonistas

Nam Gyu Ri da vida a Baek Young Ok, y así vuelve a ponerse en el papel de norcoreana haciéndonos soñar con ‘My secret Terrius‘ una vez más. Es cierto que esta ocasión su papel es mucho más prominente y activo, recayendo el peso de la acción sobre sus hombros. La suya es una interpretación sólida, llena de momentos de acción, persecuciones y algún que otro momento dramático, que queda eclipsado siempre por su rostro de perplejidad cuando lo más absurdo ocurre a su alrededor.

Kim Min Suk es Lloyd, un idol, ingenuio, aniñado y pasota. El actor de ‘Doctors‘ o ‘Descendientes del sol‘ no sobresale de ninguna manera positiva a lo largo del metraje, algo que debemos achacar a un guion que no le permite lucirse, al contrario de lo que si ocurre en la película de terror de este 2024, ‘Noise‘, donde lo vemos mucho más maduro y serio a nivel interpretativo. Lo menos creíble de este personaje es su falta de disciplina. Todos sabemos el nivel de exigencia al que son sometidos los idols, e intentando crear un personaje desenfadado han cometido el error de darle pautas holgazanas e indolentes, lo cual descompensa demasiado al personaje, quedando más bien olvidable a pesar de todas las escenas romanticas y épicas en las que se le intenta encuadrar.

Song Jae Rim como Song Jae Hoon es sencillamente una maravilla y oasis en esta serie. El actor que también este mismo año aparecía en ‘Queen Woo’ aporta a la trama el personaje más complejo, interesante y bien llevado de todo el conjunto. Mientras está en escena, parecemos estar viendo una serie mucho más intricada emocionalmente. Hay una tridimensionalidad en su interpretación que nos hace amarlo y odiarlo a un mismo tiempo. Sin dudas, la joya de la serie. Es ese antihéroe ante el que caer rendida. Le echaremos de menos en Dramaland.

Los secundarios son todo risas y buenos complementos a la serie. Ninguno de ellos sobra y todos se ganan pronto un huequito en tu corazón. Desde los militares que comparten unidad con los protagonistas hasta los civiles que acogen a la familia de la protagonista. Hay en sus escenas dinamismo y nunca falta una sonrisa en sus rostros, lo cual se traduce en una sonrisa en el tuyo, y eso siempre suma. Claro que con nombres como Steve Noh y Lee Joon-Hyuk entre otros, está más que asegurada la calidad.

‘My military valentine’ no es nada del otro mundo, pero si en alguna ocasión tienes ganas de algo muy liviano con lo que pasar el rato, puedes probar a darle una oportunidad, quizá te agrade mucho más de lo que crees. Espera de ella una buena banda sonora, mucho dinamismo y una enorme cantidad de «podría» haber sido que hará volar tu imaginación pensando en todo lo que habría sido con un poco más de presupuesto, tiempo y recursos. Sobre todo las escenas que recrean Corea del Norte están muy conseguidas y te meten de lleno en la acción y en un arco narrativo muy interesante. No dejes de contarnos que te ha parecido en comentarios.