Del guionista de ‘My ahjussi‘ nos llega ‘My Liberation Notes’, un slice of life que ofrece una intensa mirada dentro de las vidas de tres hermanos que viven a las afueras de Seúl. Dicen que las comparaciones son odiosas, así que deberás intentar no hacerlas si te atreves a ver este K-drama. Compararlo con algo previo nos llevará a buscar cosas en él que no encontraremos, y eso nos acabará decepcionando, y, entonces, no serás capaz de acabar un drama que si bien no es perfecto tiene muchas cosas que merecen ser disfrutadas y comentadas.
Cansados de la monotonía que conlleva ser adulto, tres hermanos tratan de encontrar la forma de sentirse realizados y liberarse de sus ordinarias vidas.
Este K-drama tiene que ser visto sin prisas, sin nada más que hacer que tener tiempo de exprimir sus sentidas y profundas conversaciones. ‘My Liberation Notes’ peca de repetitiva y de dar vueltas a las mismas temáticas y preocupaciones sin ofrecernos una respuesta a las situaciones vitales que se plantean en el interior de sus personajes, y, si tienes ‘prisa’, acabarás saltando trozos o abandonándola. A pesar de esto, te animo a quedarte y a profundizar en las preguntas que continuamente asaltan a los protagonistas, porque todos nos hemos sentido fuera de lugar, agotados o cuestionándonos nuestra existencia en algún momento de nuestras vidas. ¿Cómo es para los demás? ¿Se siente el resto igual que yo?
‘My Liberation Notes’ habla, y calla, sobre el quedarse, el conformarse, el atreverse y el quererse. Los tres hermanos, a través de los cuales se plantea y da respuesta a todas estas cavilaciones, y otras muchas, son tres personas adultas que comenzaron su vida laboral hace algún tiempo, pero que, por unas cosas u otras, aun residen en el núcleo familiar de su infancia. Esto hace que podamos ver cómo es una dinámica familiar real. Donde se comparten espacios, comidas y donde se llora o se mantienen conversaciones sin mucha privacidad, incluso cuando uno sencillamente quiere desaparecer.
¿Somos quiénes somos por haber nacido donde lo hemos hecho? ¿Sería mi vida distinta? ¿Lo sería yo si viviese en una gran ciudad en vez de en una pequeña aldea? Esto quizá no es algo que muchos se cuestionen, porque viven en un lugar con acceso a cultura, facilidades de transporte y otras cosas que damos por sentado, pero, para aquellos que hemos nacido en un sitio pequeñito, y que seguimos viviendo en él, es una cuestión clave, que vive contigo incluso cuando has escogido quedarte en tu tierra por voluntad propia.
Tres hermanos y un extraño
Yeom Gi-Jeong (Lee El) es la mayor de los tres hermanos, aunque nunca lo dirías. Es una mujer llena de inseguridades, con un fuerte temperamento en el que escudarse para no sufrir. Odia vivir en la aldea de Sanpo, pero a pesar de sus continuas quejas no es capaz de ponerles solución, culpando continuamente a agentes externos su malestar y sentimiento de estancamiento. La presión social debido a su edad no ayuda, y desesperadamente busca alguien de quien enamorarse para así intentar llenar vacíos existenciales que no paran de crecer. Es muy difícil no ver pedacitos nuestros en este y el resto de personajes. Son tan humanos que asusta.
Yeom Chang-Hee (Lee Min-Ki) es el varón de la familia. Un joven recordado por su madre como un niño con una enorme vitalidad y una amplia sonrisa, pero que en la actualidad no sabe qué esperar de la vida o como alcanzar la felicidad. Tal y como le ocurre a sus hermanas vive en un bucle sin fin de monotonía y autocomplacencia teñida de frustración. Algo de lo que no es plenamente consciente cuando comienza la serie, pero que el guion si le permite trabajar. Lee Min Ki y su personaje son probablemente una de las cosas a destacar tanto en el campo interpretativo como de crecimiento del personaje dentro de la serie.
El actor de ‘Oh My LadyLord‘ ofrece en la serie una enorme variedad de emociones y sentimientos ante la cámara, y siempre nos llega. Nos hace reflexionar, reír y llorar a partes iguales. Las suyas son las escenas oasis de la serie, con las que verdaderamente dejamos escapar una carcajada porque su personalidad y línea de pensamiento nos lleva a visitar situaciones que rozan el surrealismo más absoluto que a veces gobierna nuestras vidas.
Yeom Mi-Jeong (Kim Ji-Won) es la pequeña. Una joven enormemente introspectiva, introvertida y tímida que no parece disfrutar de su vida. Se siente insatisfecha e incomprendida. Querría poder chillar a los cuatro vientos, pero no sabe como hacerlo. Es consciente de su situación personal y sabe lo que necesita hacer para poder salir de la espiral que la arrastra siempre a la casilla de salida, pero siempre hay algo que le frena a hacerlo.
El Sr. Gu (Son Suk-Ku) es un hombre en ruinas. Una persona que se escuda en el alcohol huyendo de sus acciones pasadas. Su llegada a Sanpo, un lugar que será el oasis que lo mantenga en el limbo. Sin vivir, pero tampoco morir, hará que cambie su forma de ver la vida. Su presencia alterará la vida de la familia para la que comenzará a trabajar y cuando las miradas de soslayo y las cortesías sociales pasen al interés personal, la necesidad de conocer más y de descubrir que hay tras la fachada de un hombre del que solo conocen su nombre, todo cambiará, porque la irrupción de un elemento ‘salvaje’ y desconocido en el espacio inamovible que es la casa de los Yeom, se verá sacudido como una piedra al caer sobre la superficie de un lago, generando un efecto dominó para el que ninguno de ellos estaba preparado.
‘My Liberation Notes’ puede ser la historia de estos tres hermanos, pero realmente es la de la pequeña de la familia, con sus reflexiones vitales y sus relaciones personales la que nos lleva episodio a episodio por la historia que se nos presenta. La dinámica que se genera entre ella y el personaje interpretado por Son Suk-Ku es complejísima y muy difícil de entender o compartir. Ambos personajes encuentran refugio el uno en el otro, pero no lo hacen de una forma convencional y eso nos permite disfrutar de momentos muy profundos a través de sus conversaciones y silencios.
Algo que no consigue una sacudirse mientras está viendo la serie es las ganas de zarandear a los protagonistas. La inacción, las vueltas continuas a las mismas situaciones y conversaciones nos exasperan, pero más que probablemente lo hacen porque son tan reales como la vida misma. Qué difícil es el cambio, cuanto miedo dan los saltos al vacío y cómo de rápido pasa la vida ante nosotros sin apenas darnos cuenta.
Y aun así, una de las mejores cosas de ‘My Liberation Notes’ es el paso del tiempo. Aquí se utilizan las estaciones para llevarnos a través de la vida de los personajes. El uso metafórico de éstas en las conversaciones que se mantienen entre las hermanas, así como real, lo hace refrescante porque nos permite ver que el tiempo pesa sobre ellas a pesar de moverse la trama en unos pocos de años. Es como si el tiempo pasase demasiado deprisa y demasiado lento a un mismo tiempo. Una sensación que nos invade con mucha frecuencia en nuestras vidas diarias y que aquí se transmite con naturalidad recordándonos que no somos tan distintos unos de otros.
Estéticamente este K-drama está muy cuidado. Los espacios, a pesar de ser siempre los mismos no son monótonos, porque cambian con el pasar de las estaciones. La banda sonora es una preciosidad y nos acompaña de forma amable a lo largo de los episodios, pero la falta de un guion que de respuesta a los planteamientos iniciales y centrales de la trama nos hace pensar, en más de una ocasión, que esta serie se habría beneficiado de menos episodios o de haber tenido un tratamiento más profundo en sus personajes secundarios.
Unos personajes secundarios que son clave, y probablemente lo verdaderamente interesante del planteamiento social que ofrece de fondo la historia. A través de ellos se trabajan los celos, las inseguridades en el trabajo y en las relaciones amorosas. Se habla de divorcio, de creencias, de honestidad, respeto, de cómo de difícil es crear una vida a partir de cero y también de lo sacrificada que es la vida familiar. Se podría haber hablado en profundidad de como cada uno de nosotros vive como mejor puede o sabe y de como nos preguntamos, inevitablemente si alguien nos querrá cuando nos golpea la soledad. Pero una maraña de situaciones y personajes cuya historia está construida de forma enrevesada oscurecen lo que podría haber sido, dejándonos un producto que se queda así lejos de lo excelso.
Dicho todo esto, si eres una de esas dramalovers a las que le encantan los K-dramas que tienen mucho sobre lo que reflexionar, que se atreven con temas complejos desde la mirada de lo cotidiano, mientras ofrece un romanticismo lo suficientemente distinto como para captar nuestra atención, encontrará en ‘My Liberation Notes’ una serie que le permita comenzar una conversación honesta consigo misma mientras ve luchar día a día a sus protagonistas por mejorar su existencia.
Tráiler de ‘My Liberation Notes’
¿Nos encanta?
Overall
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Fotografía
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Guion
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Edición y montaje
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Banda Sonora
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Interpretaciones
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Originalidad
User Review
( votes)Lo más destacable
- Una banda sonora que encaja a la perfección.
- Las temáticas que pone sobre la mesa, aunque no sea capaz de centrarlas y darles el crédito que merecen.
- Un lujo de personajes secundarios que llenan el alma.