‘Perros de caza’ cuenta la historia de dos jóvenes boxeadores, Kim Gun-Woo (Woo Do-Hwan) y Hong Woo-Jin (Lee Sang-Yi) que ponen un pie en el mundo de los préstamos privados en busca de dinero y quedan atrapados en una vorágine de bandas criminales de la que solo podrán salir luchando.
Por fin ha llegado a nuestras pantallas ‘Perros de caza’. Decir que nos moríamos de ganas de ver a Woo Do Hwan en un papel así de intenso y potente tras su alistamiento sería quedarnos cortas, pero, a pesar de todo el hype, como siempre, intentaremos ser lo más objetivas posibles, partiendo, por supuesto, de la base de que la trama que nos atrajo hacia ella en un primer instante no fue precisamente la del guion.
Una vez dicho lo obvio comencemos a hablar de la serie. ‘Perros de caza’ cuenta con una premisa a la que se le podría haber extraído mucho más jugo del que finalmente vemos. Esta es una historia de desprotección social, abuso de poder y usura de esas que dan juego con solo ponerlas juntas, pero como verás con el paso de los episodios, todo esto se diluirá, quizá, con demasiada premura, dejándonos únicamente una historia de venganza que ni siquiera es la de nuestro protagonista y una amalgama de personajes, a la que no le ponemos pega ninguna pero que no alcanzamos a encajar en el conjunto final sin antes tener que limarle al guion bastantes asperezas.
Kim Gun-Woo (Woo Do-Hwan) es un joven idealista, que sueña con poder cambiar su vida y la de su madre entrenando sin descanso para ser reconocido en el mundo del boxeo. Cuando lo conocemos, pronto nos damos cuenta de que la suya es una de esas personalidades de naturaleza bondadosa, casi inocente. Es consciente de su fuerza y destreza, pero en ningún momento se jacta de ella, más bien todo lo contrario. Por desgracia, la construcción de un personaje tan plano hace que nos perdamos la que podía haber sido una de las interpretaciones de la carrera del actor. No le permite el guion caer de verdad y levantarse resurgido de entre las cenizas.
El mundo de Kim Gun-Woo se verá sacudido por partida doble cuando la pandemia de la Covid-19 golpee al mundo entero y se lleve por delante el negocio de su madre, quien regenta una cafetería en el barrio en el que viven. ‘Perros de caza’, nos vuelve a meter en la vorágine de desazón e intranquilidad que fueron aquellos meses de pandemia en la que todo cambió de la noche a la mañana. Esos meses donde las competiciones y espectáculos quedaron sin público en las gradas, donde las calles se volvieron regueros de personas de rostro tapado y donde la incertidumbre pesaba como una losa sobre los hombros de todo aquel que dependía de las interacciones sociales para ganarse la vida.
No son muchas las escenas que ponen el acento en esto, pero quizá sea aún lo fresco que está el recuerdo en nuestras mentes, que nos golpea dejándonos casi sin aliento cuando la primera mascarilla aparece y todo vuelve de golpe a ser como antes. Los negocios pendiendo de un hilo, las deudas apilándose en facturas que no paran de llegar, pues el mundo sigue girando aunque para muchos haya frenado de golpe. Esta bien podría ser la historia de la mitad de la población mundial, y es por eso que se antoja demasiado ligera, ‘Perros de caza’ no es capaz de aprovechar el pozo de decadencia al que pensábamos se lanzaría cuando vimos el tráiler y leímos la sinopsis. Este K-drama queda lejos de ‘Extracurricular‘ o ‘My name‘.
Cómo ya habrás adivinado, el guion tiene sus faltas, pero se compensa con un trabajo impecable de actuación y de efectos técnicos que te dejan encantada golpe tras golpe, detalle tras detalle.
Impecable a nivel técnico. Si has leído más de una crítica de esta web sobre K-dramas pensarás que utilizo demasiado estas palabras, pero no puede evitarse cuando es real. ‘Perros de caza’ se suma a la maravillosa tendencia de presentar a su público con un buen hacer técnico, casi insuperable. No hay en toda la serie un golpe que no se sienta doloroso sobre el cuerpo en el que cae, no hay plano que modificar para hacerlo más realista o intenso. Las cámaras se mueven con presteza, enfocan la acción donde más impacto visual causan y todo ello es acompañado de una banda sonora que nos hace mantener el aliento a la espera de más golpes por llegar, cada cual más impactante y brutal.
Porque si algo no le falta a este K-drama es personajes dándolo todo. El carisma que rebosan todos ellos es sencillamente despampanante. Desde Heo Jun-Ho que hace las veces de CEO redimido de un pasado turbio en el mundo de los préstamos hasta un Park Sung-Woong al que odiamos mientras da vida a un prestamista sin alma que hará todo lo que esté en su mano por amasar una ingente fortuna con la que poder ostentar una vida de lujo y superioridad social que en su juventud no tuvo. Aunque sí hay personajes que nos sorprenden y con los que se nos cae la baba ya sea por su compostura o por unos niveles dramáticos fascinantes. Hablamos de los llevados a la ficción por Lee Hae-Youn, Ryu Soo-Young y Choi Si-Won.
Los dos primeros forman parte del antiguo equipo de trabajo del Presidente Choi (Heo Jun Ho). Ambos seguían órdenes sin cuestionar o dudar de lo que hacían, aunque eso supusiese amenazar y torturar a quienes no accedían a sus peticiones. En la serie los conocemos ya adultos, fuera de esa vida, pero manteniendo sus habilidades y lealtad intactas. Estás deseando verlos en acción aunque aún no lo sepas. En cuanto a Choi Si-Won prepárate no eres capaz de imaginar los muchos matices con los que nos deslumbra dando vida a Hong Min-Beom, un chaebol que siempre lo ha tenido todo bajo control.
Los personajes femeninos son muy escasos, salvo Yun Yoo-Sun, quien lleva a pantalla a la madre del protagonista, y que por supuesto no necesita introducción, pues la llevas viendo desde hace más de veinte años en K-dramas como ‘Just Between Lovers’. Aparece, también, con un papel que deja mucho que desear pero que podría haber quedado en el recuerdo de los espectadores, Kim Sae-Ron, esa niña de ‘El hombre sin pasado‘ que ahora ya adulta interpreta a una joven que lleva el negocio de prestamos del presidente Choi. Una pena que por motivos personales la actriz no haya aprovechado la oportunidad de brillar junto a un reparto que podría haberla puesto en el mapa.
En definitiva, llegarás a ‘Perros de caza’ por Woo Do Hwan, te quedarás por su presencia y su buen hacer junto con el resto de un elenco que se encuentra impecable, pero achacarás a su guion la falta de continuidad y cierre de las subtramas que, aunque escasas, desbarajustan algo la experiencia de ver minuto tras minuto a nuestro querido «guardaespaldas» darlo todo por sobrevivir en un ambiente hostil.
Tráiler de ‘Bloodhounds’
¿Nos encanta?
Overall
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Fotografía
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Originalidad
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Guion
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Interpretaciones
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Banda Sonora
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Edición y montaje