Dijo Pablo VI: “La dignidad de la persona requiere que obre según su libre elección, sin ninguna coacción externa”. Hay que aplaudir que haya llegado a salas españolas la película búlgar..a ‘La lección’, de Kristina Grozeva y Petar Valchanov, que se alzó con el Premio Nuevos Realizadores de la última edición del Festival de San Sebastián.
Nadezhda es una joven profesora de inglés que vive en un pequeño pueblo de Bulgaria. En su clase hay un alumno que roba, Nadezhda quiere averiguar quién es para poder darle una lección sobre lo que es correcto y lo que no. Sin embargo, el drama familiar tocará la puerta de la vida de la maestra, que debido a unas deudas con prestamistas por parte de su irresponsable marido, deberá buscar la manera de saldar la deuda. Esto provocará un importante dilema moral en la vida de la profesora.
Estos dos realizadores formaron una dupla potente en cortometrajes que les llevó a una nominación a los Premios de Cine Europeo en 2013 gracias a ‘Jump’. Ahora el salto al largometraje ha sido arriesgado y sin red, al no tener ayudas del gobierno búlgaro. Esto condiciona a una cinta que se merece un fuerte aplauso por el mérito de hacer una loable producción con pocos recursos.
La forma en que Grozeva y Valchanov presentan la trama es de forma ascendente. Se inicia de manera normal, rutinaria para, cuando llega la noticia de la deuda, empieza el dilema, las dudas. La ética es puesta a prueba, se muestra que los consejos es más fácil darlos. Y aun así queriendo hacer lo correcto, no es fácil actuar consecuentemente.
Los directores han creado un guión donde la protagonista es una madre coraje. Su vida no es fácil, tiene un marido inútil, las deudas que ha provocado acechan, los prestamistas no son precisamente amables. Y ella, impasible, mantiene el tipo, no se deja abatir. Cierto es una madre valiente, que protege lo suyo, pero tampoco pertenece a esa clase de personajes femeninos sensibleros propios del cine bienintencionado. Nadezhda está más cercana a personajes propios de los Hermanos Dardenne como el de Émilie Dequenne en ‘Rosetta’ o Cécile de France en ‘El niño de la bicicleta’.
Pese a que los Dardenne parece ser la fuente primaria, la película tiene reminiscencias más cercanas del cine de Cristian Mungiu, de hecho el cineasta rumano está más cercano culturalmente que el de los cineastas belgas. Sin embargo, y eso es algo propio del cine europeo de autor, comparte con ambos el darle planes cortos a la protagonista. Hay que darle su mérito, la película ha carecido de apoyos gubernamentales y consigue tener una calidad cinematográfica notable. Es verdad que, pese a la dureza de los hechos mostrados, no innova especialmente en el género pero tiene la suficiente personalidad para, pese a ese “pero”, conseguir mostrar una cinta notable, con clara denuncia social.
‘La lección’ puede convertirse en una metáfora sobre la sociedad actual, aquella que pide transparencia y justicia pero que, en algunos casos, se ve obligada a ir en contra de lo que demanda. Una paradoja propia de la vida, que no es fácil llevar si se quiere actuar de forma consecuente. Un debut interesante el de estos realizadores búlgaros, que pese a no contar con apoyos, sí contarán con el respaldo del público.