En un mundo azotado por una ola de mutaciones que transforman gradualmente a algunos humanos en animales, François hace todo lo posible por salvar a su esposa, afectada por esta misteriosa enfermedad. Mientras la sociedad se ve abocada a un nuevo orden, iniciará junto a Émile, su hijo de 16 años, una búsqueda que los cambiará para siempre.
Hay veces que lees una sinopsis y esta capta rápidamente tu atención. Crees que puede ser la película ideal para ti, pero no tienes ni idea de lo mucho que va a impactarte y agradarte hasta que no sales del cine con esa increíble sensación que es haber visto un peliculón tremendo que no esperabas encontrar. Eso es lo que ocurre con ‘El reino animal’, que te sorprende y fascina a partes iguales.
Puedes leer con tranquilidad, nada de lo que aquí digamos estropeará tu experiencia en la sala de cine, pero si te empujará a ir y disfrutar de una película que podría pasarte desapercibida si no eres de esas personas que se decantan por títulos «fantásticos». ‘El reino animal’ es mucho más que una película fantástica que ver en un festival. Es una película cuya historia habla de relaciones en círculos íntimos y también a nivel social.
Habla de las complejidades de una relación padre-hijo adolescente haciendo frente a una situación devastadora, habla de aceptar a quienes nos rodean y quererlos por quienes son, y fueron, en lo más profundo de su ser, mientras nos muestra personajes que se aferran a la idea del ser querido del que una vez se enamoraron y que aun hoy da sentido a su vida.
Mientras se lucha contra el sentimiento de pérdida, el caos institucional frente a una crisis sanitaria sin parangón y un sistema de valores sociales que no está preparado para aceptar verdadero cambio los minutos corren fugaces presentando una sociedad que nada tiene de fantástica y si de prejuiciosa e intransigente.
Con el paso de los minutos vamos conociendo, poco a poco las novedades de este mundo fantástico que Thomas Cailley dirige con un tremendo acierto, dejándonos disfrutar de un espectacular Romain Duris, a quien ya viste en ‘Los tres mosqueteros: D’Artagnan‘ (2023) haciendo las veces de padre luchador bañado por rasgos antisistema que mantiene, a duras penas, la compostura en un mundo que se tambalea y que lo pone a prueba de forma continua. Aunque quien verdaderamente sorprende es Paul Kircher, un joven que en cada gesto acierta y transmite al espectador la miríada de sensaciones que fluyen por el cambiante ser de su personaje.
Siendo su guion e interpretaciones un acierto total en cuanto a originalidad y solidez, solo era necesario completarlo y darle el toque final con una fotografía notable, localizaciones auténticas y vívidas que acompañadas de un maquillaje y efectos especiales detallistas y creíbles hicieran resonar el conjunto aún más en nuestro recuerdo. Pues todo eso consigue ‘El reino animal’, al que solo nos queda sumar una edición de sonido y banda sonora llena de energía que hacen reverberar la complejidad de un mundo que va a atraparte.
No dudes, ve al cine, déjate llevar por la imaginación y buen hacer de sus creadores y disfruta de la película, el cine se creó para dar vida a este tipo de historias.
Tráiler de ‘El reino animal’.
¿Nos encanta?
Overall
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Originalidad
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Fotografía
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Montaje y edición
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Música
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Guion
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Interpretaciones
User Review
( votes)Lo mejor:
- Una banda sonora tan intensa como la trama a la que da vida.
- Una idea bien desarrollada.
- Interpretaciones de 10.