‘Tomorrow’ es probablemente uno de los K-dramas con los que más has llorado en tu vida dramalover. Es una de esas series que te llegan al corazón porque todas hemos sufrido pérdidas en nuestras vidas, hemos pasado por momentos traumáticos o nos hemos sentido verdaderamente perdidas o solas en algún momento. Con ‘Tomorrow’ viajas por vivencias extremadamente duras, pero también reconoces la bondad, el cariño y la alegría de vivir que nos rodea, y eso hace que sea necesaria y curativa a un mismo tiempo.
Aunque no muchos, hay spoilers en este post. Por lo que quizá no quieras seguir leyendo si aún tienes pendiente ver ‘Tomorrow‘, pero nuestra crítica no tiene adelantos o spoilers, así que puedes leerla con total tranquilidad.
A lo largo del post seguiremos el orden de aparición de los casos. Como bien sabes, duran más o menos dos episodios cada uno. No dudes en dejarnos cualquier duda o consulta justo al final de esta página o en nuestras redes sociales. ¡Vamos a ello!
El caso de Noh Eun-bi
‘Tomorrow’ empieza su secuencia de casos con uno de los clásicos más recurrentes dentro de la ficción surcoreana, el abuso escolar. Con estos primeros episodios la serie ya te prepara de forma espectacular para todo lo que está por llegar. Además, estos son los episodios más atrevida técnicamente a nivel de cámara y efectos especiales, sobre todo cuando se introducen en el mundo de los recuerdos y las posibilidades de alterar el cerebro de Noh Eun-bi se incrementan alarmantemente.
¿Qué harías si tu peor pesadilla se encontrase frente a ti y nadie hiciera nada? ¿Cómo se sobrevive al pánico y terror de ser golpeada y humillada diariamente? ¿Cura el tiempo todas las heridas? No, no lo hace. Los problemas y los traumas no pueden esconderse en un rincón de nuestra mente, porque algún día pueden volver sin avisar, y eso es lo que le ocurre a Noh Eun-bi, que se reencuentra con su peor pesadilla, Kim Hye-won, su acosadora en el instituto. que en la actualidad se gana la vida vendiendo un webtoon de una joven que lucha contra sus acosadores. La hipocresía y el eufemismo rezuman en esta historia.
Seguro que reconoces a ambas actrices. Jo In es quien da vida a Noh Eun-bi, y a ella la has visto muy recientemente en ‘Taxi Driver‘, donde interpretaba el papel de Kang Maria. Por su parte Kim Chae-eun (‘Touch Your Heart‘) es Kim Hye-won, a quien odiarás profundamente. Estos dos primeros episodios son clave para conocer a los personajes principales y ver cómo les afectan los casos, así como asentar el ritmo de la serie, que es trepidante y no cesa en ningún momento. ¿Preparadas? Esto no ha hecho más que empezar.
El caso de Namgoong Jae-su
Como ‘Tomorrow’ va sobre realidades sociales, no tardó en poner de manifiesto uno de los mayores problemas de la sociedad surcoreana, la increíble presión social a la que se enfrentan los jóvenes para conseguir un puesto de trabajo en una buena empresa.
Ryu Sung-rok da vida a Namgoong Jae-su, el mejor amigo de nuestro joven protagonista, Choi Jun-Woong. Un chico que ha hecho todo lo que se le ha pedido a lo largo de su vida. Ha estudiado y trabajado para mantenerse, ha llevado una vida ejemplar, y aún así no pasa el corte. Es la tercera vez que se presenta a las pruebas para la policía y los suspensos y el rechazo se juntan con un momento vital en el que su único punto de apoyo, su mejor amigo, se encuentra en una cama en coma.
Las ganas de vivir han desaparecido de Ryu Sung-rok, hasta tal punto que su vida peligra, por lo que para poder traer algo de alegría de nuevo a ella Choi Jun-Woong consigue que la jefa utilice una de esas herramientas fantasiosas que nos fascinan y que aparecen con cuenta gotas a lo largo de la serie. Se trata en este caso de un coche con el que viajar al pasado, a uno de los momentos más felices de su infancia, cuando su padre aún vivía.
Y sí, si has visto el episodio sabes que las imágenes que acabas de ver son probablemente las más hilarantes de toda la serie. Un momento de esos que queda para siempre rondando por Twitter y la galería de nuestros móviles. No hay nada como el pollo frito para reconfortar el alma.
El caso de Kang Woo-jin
Este caso es descorazonador por el tremendo dolor que sufre el joven guitarrista Kang Woo-Jin (Kang Seung-Yoon) al perder a su pareja, Heo Na-young, en un accidente de tráfico. La joven que intenta por todos los medios proteger a su novio y hacerle ver que no es su culpa, está interpretada por la actriz Lee No-ah, que aparece en series como ‘Hospital Playlist’.
Este episodio habla sobre la culpa, sobre no encontrar el rumbo y sentir que el suelo bajo los pies ha desaparecido. Una historia que se presenta preciosa, mostrando su romance desde el comienzo, cualquier romcom que se precie podría tenerlos como protagonistas y haber enamorado los corazones de las espectadoras, pero, como suele ocurrir en Dramaland, el mayor asesino de todos, un camión blanco, hará su acto de presencia y acabará con la vida de la joven, dejando a un protagonista atrapado en un bucle sin fin, ese en el que sus seres queridos mueren y el sobrevive, una vez más.
Es increíble como la mente humana trabaja y como nos convencemos de que el azar o el destino son algo que podemos controlar o que depende de nosotros. Aquí la serie trabaja en torno a ello y consigue hacernos empatizar tremendamente con sus personajes vivos, y muertos. Este es, quizá uno de los episodios más flojos, aún así no puede denostarse totalmente pues su trabajo interpretativo es bueno y mantiene el hilo general de la trama dando un descanso, si es que puede llamarse así al hilo general.
El caso de Lee Young-cheon
Seguro que este es probablemente uno de los episodios con los que más lloraste de todos. En este caso un veterano de guerra es el absoluto protagonista y todos los personajes principales se rinden ante su presencia. Es un golpe de realidad tras otro el que se ofrece en este episodio. Primero porque se presenta la cruel realidad de la sociedad surcoreana, esa que olvida y abandona a sus mayores, los cuales sobreviven a duras penas, día tras día, con los pocos ingresos que consiguen atraer llegando incluso a vender cartón o recoger basura para sobrevivir un día mas.
Pero no solo se habla de ese abandono sistemático a nivel gubernamental y el olvido colectivo de alguien que sacrificó su vida y la de sus seres queridos por una nación que no reconoce verdaderamente su sacrificio y la importancia de sus actos para que el país sea el que es en el presente. También se habla de la soledad y de tener la oportunidad de ser recordado.
El actor escogido para dar vida a este veterano de guerra es Jeon Mu-Song, uno de esos grandes actores surcoreanos con una filmografía tan extensa que sería difícil de ver completa en una sola vida, pero a quien seguro recuerdas si viste ‘The guest‘, donde hace de abuelo del protagonista.
Este episodio es tremendo porque recrea un campo de batalla y te traslada a un género bélico perfecto en un abrir y cerrar de ojos, y lo hace casi sin esfuerzo. Es el primer episodio en el que vemos a todas las parcas dejar atrás sus diferencias y unirse para ofrecer un solemne y conmovedor último adiós. Si eres capaz de aguantar las lágrimas en este episodio, habrás conseguido arrebatarme el título de dama de hielo, porque es a partir de este episodio empiezan a llorarse las lágrimas que no sabías tenías.
El caso de Shin Ye-na
Ahora nos toca viajar al mundo laboral, a la presión del día a día donde esos jefes abusivos y machistas machacan a sus trabajadoras, pero como ‘Tomorrow’ siempre añade un poquito más para no hacerte olvidar lo duras que son algunas realidades, suma al conjunto un caso de Bulimia. Este episodio es probablemente uno de los más corales de todo el conjunto, ya que cuando nuestros protagonistas se acercan a la oficina donde ha saltado la alerta no saben aún quién es quien está en riesgo de cometer suicidio.
Uno a uno vamos conociendo las dificultades vitales a las que cada una de los trabajadoras de la oficina se enfrenta y con ello pronto nos damos cuenta que la presión es enorme en todos, por motivos diametralmente opuestos, pero esto nos hace reconocer lo mucho que aguantamos y padecemos sin hablar o pedir ayuda, porque hemos generado una sociedad individualista y con un falso sentido de perfección que nos hace aislarnos y cargar sobre nuestros hombros el peso del mundo.
Shin Ye-Na, interpretada por Han Hae-In, una joven que sufre trastornos alimenticios y que no sabe como pedir ayuda para mejorar su salud física y mental, recuperando con ello su autoestima. La presión es tal que para ella, quien supuestamente vive una vida ideal a los ojos de los demás, que la única solución que ve es el suicidio.
Pero también juegan un papel decisivo y muy esclarecedor Jeong Bo-Ram, llevada a la vida por Kim Min-So y Jo Seung-Yeon que interpreta a Lee Dong-Ja, quienes sufren acoso por parte de su jefe aunque por motivos distintos. La primera por aceptarse y ser quien quiere ser, aceptando su cuerpo y la segunda por regresar a la vida laboral tras ser madre, y quererlo todo. ¡Bravo por ellas!
Este episodio nos recuerda lo mucho que hieren las palabras, incluso cuando son dichas sin maldad alguna, así que si algo se saca en claro de este episodio es que sale mucho más a cuenta no comentar sobre el físico de nadie, y menos cuando no se te ha preguntado.
El caso ‘Broker‘
Este episodio conecta justo la parte central de la serie con el comienzo, cuando el equipo se encontraba investigando una serie de suicidios colectivos que no tenían un patrón fijo. Sin lugar a dudas es uno de los más perturbadores porque pone en la tesitura de tener que ayudar a un asesino a sobrevivir y eso hará mella en los protagonistas, que se verán moralmente comprometidos con su labor profesional y unas emociones a flor de piel difíciles de gestionar.
Un psicópata que se alimenta de los momentos más bajos de las personas incentivándolos y empujándolos al suicidio. Se pone de relieve así el hecho de la protección de datos en internet y de la facilidad con la que nos exponemos en redes sociales. El encargado de dar vida al que probablemente es uno de los personajes que más odiamos a lo largo de la trama es Min Jin-Woong, que nos enamoró en ‘Chocolate‘ y ‘Recuerdos de la Alhambra‘.
El caso de Kim Kong
¿Creías que no te podrían sorprender aún más? Eso es porque ni siquiera se te había pasado por la cabeza que nuestras parcas en Jumadeung también recogiesen animales para llevarlos a su siguiente vida. Aquí el golpe es bajo, muy bajo, y lloras de forma continuada casi todo el episodio sin saber muy bien por qué.
En este caso, la hermana del joven protagonista hace acto de presencia y salva al perrito que nos acompañará durante este episodio, de ser atropellado en plena calle. Es entonces cuando empieza una búsqueda desesperada para ver quien es el dueño del pequeño animal. Es increíble la humanidad que rezuma este episodio, que nos recuerda lo mucho que nos cuidan, acompañan y quieren nuestras mascotas. Es todo un tributo a su legado y la huella que deja en nuestras vidas.
Sencillamente insuperable por su originalidad y acierto en el tratamiento de los diálogos y las emociones que corren a raudales entre pausa y pausa. Kim Hun es un joven cuya vida pasó a estar llena de alegría cuando Kong entró en ella. Un amigo en el que encontrar confort y que ahora ha desaparecido. La búsqueda es incesante y despedirse vital para cerrar un episodio trascendental en la vida de ambos. ¿Viste ‘Bad and Crazy’? De ahí es de donde te suena Cha Hak-Yeon, el dueño de Kong.
El caso de los gemelos Cha Yoon
Hemos hablado ya de culpa en este post, pero quizá sea en este episodio donde más fuerte pega y donde se junten nuestros miedos más diarios en un solo episodio. Todas tenemos cuidado al salir de noche, es una vergüenza y pena absoluta que así sea, pero es nuestra realidad, y la vemos en pantalla en este caso. Gong Jae-hyun es Cha Yoon-jae, el gemelo de Cha Yoon-hee (Lee Ji-won), una joven que ha sido víctima de asalto sexual. El joven le dijo a su hermana que no la acompañaría a casa esa noche porque estaba con sus amigos, y el resto es historia.
Este episodio es brutal, no esconde absolutamente nada, como el resto de ellos, si lo pensamos fríamente, pero aquí, ver a la joven golpeada, forzada y abandonada tras la agresión se clava como un puñal mientras los protagonistas intentan salvar a Cha Yoon-hee intentando llevarle algo de justicia, algo muy complicado cuando se le sigue echando en cara a las víctimas que ‘iban buscándolo’, que deberían ser más cuidadosas. En más de una ocasión a lo largo de la hora que dura este caso nuestras parcas pierden los papeles, y eso las hace tan humanas como cualquiera de nosotras.
El episodio termina con unos hermanos reconciliados, trabajando por retomar sus vidas y con un culpable literalmente rodeado de llamas. ¿Se puede considerar justicia divina? Es una pregunta tan difícil de contestar como de formular.
Se aprovecha este episodio para, por fin, darnos algunas respuestas sobre quien es Lim Ryung Gu y cual es su historia pasada. Es aquí donde descubrimos que su madre fue violada por una banda criminal y eso le hizo quitarse la vida, dejando a su hijo desamparado y culpándola por un abandono que a una edad tan temprana no comprendía.
El caso de Im Yu-hwa
Este caso pega muy cerca de casa y nos destroza un poquito más el corazón. Una madre que pierde a su bebé y un hijo que perdió a su madre se entremezclan generando episodios de tremendo dolor y también sanación. Descubrir la verdad tras años de engaño, poder tener la oportunidad de decirle a quien quieres que lo amas, una vez más, aunque sea fugazmente y saber que aunque no a tu lado, la persona a la que quieres será feliz en su siguiente vida es la idea entorno a la que pivota el episodio 11.
Min Ji-ah da vida a Lim Yu-hwa, quien en otra vida fuera la madre de nuestra parca Lim Ryung Gu, pero quien ahora es una joven madre que ha perdido a su bebé al dar a luz. Hay palabras para los hijos que pierden a sus padres, para las personas que pierden a sus parejas, pero no hay una para nombrar a los padres y madres que pierden a sus hijos, quizá porque es algo tan contra natura y doloroso que no hemos sido capaces de nombrarlo a lo largo de nuestra historia. Este es uno de los episodios más bonitos por el cierre tan delicado que se ofrece a las historias de sus protagonistas, pero desgarra a cada momento, porque cuando crees que hay algo de paz y felicidad esta se destruye como cuando se despierta de un buen sueño mientras se vive un infierno.
El caso de Yoo Bok-hee
¿Otra patadita en el estómago? No iban a irse, si no era por la puerta grande. Los guionistas de ‘Tomorrow’ nos lanzan la bomba de bombas cuando nos ponen en frente una de las temáticas históricas más difíciles de contar de la historia de la humanidad, los campos de concentración donde encerraban a las llamadas mujeres de consuelo. Todo un eufemismo para referirse a las esclavas sexuales secuestradas por el Ejército Imperial de Japón.
Kim Yong-rim una actriz que ha participado en mas de 35 K-dramas, entre los que destacan ‘Love on a Rooftop‘, da vida a Yoo Bok-hee una mujer que recientemente ha descubierto que su amiga de la infancia había sido mujer de consuelo durante la ocupación japonesa de la península y qué cree se debió a su culpa, al ser ella quien la había convencido para ir a trabajar al puesto que de forma encubierta se anunciaba en el periódico local. Esa joven que marchó para encontrar el infierno en la tierra es Yun-i, que se encuentra interpretada por la joven Park Hee Jun.
A quien seguro reconociste es a nuestra querida Kim Young-ok, esa abuela a la que todas adoramos en Dramaland y que ha participado en todas tus series favoritas (‘Jirisan‘, ‘Mouse‘ ‘The King: Eternal Monarch‘…) y que aquí interpreta el papel de una joven que fue compañera de reclusión y mujer de consuelo junto a Yun-i, la amiga común que tiene con Yoo Bok-hee.
Este episodio es un relato honesto que ofrece a la población surcoreana, y también internacional, la oportunidad de no olvidar o de conocer por vez primera uno de los mayores horrores llevados a cabo por el hombre, para así, evitar vuelva a ocurrir en el futuro. Un episodio clave que complementa de forma extraordinaria a la serie gracias al papel de Ro Woon, quien golpeado por la realidad de las mujeres que conoce promete recordar.
Y para rematar la faena nos meten de lleno en la historia pasada de Park Joong-Gil y Koo Ryeon y todo por fin se aclara. Su relación sale a la luz y también como todo termina en sacrificio y tristeza infinita por no haber sabido proteger lo que se tenía, y por no ser capaz de reconocer las necesidades y sentimientos propios y ajenos.
El caso de Ryu Cho-hui
‘Tomorrow’ acaban cerrándolo todo con un precioso lazo que une tramas pasadas, presentes y futuras en una sola, dándole al conjunto el cierre que merece y a los espectadores las respuestas que anhelaba y también las preguntas que nos dejan pensando en hacia donde irán unos protagonistas que han calado en nuestros corazones.
En este episodio contamos con Kim Si-eun, a quien viste en ‘Love Alarm‘ como Ryu Cho-hui, una popular idol que en su vida previa había sido la dama de compañía de Koo Ryeon. La presión mediática y la desestructuración familiar se comen la vitalidad de esta joven día a día. Un toque de atención a la hipocresía y mentiras en las que vivimos en la actualidad, donde se expone a juicio continuo y a escarnio popular a personas que solo hacen su trabajo e intentan vivir lo mejor que pueden.
Las parcas se acercan a ella y le recuerdan lo maravillosa que es la vida cuando se comparte. Lo satisfactorio y gratificante que es compartir una comida con alguien y tener quien se preocupe por ti.
La forma en la que el guion hila situaciones morales y éticas presentes en nuestras vidas con situaciones que pudieron ocurrir hace más de 400 años nos hace ver que hemos avanzado en muchas cosas, pero otras, permanecen exactamente igual. Los prejuicios e intolerancia siguen gobernando nuestras vidas y está en nuestras manos cambiar la tendencia.
‘Tomorrow’ es descorazonadora en el 90% de su metraje, pero es capaz de dejarnos en una nota positiva que habla de superación, de caerse y levantarse. Vivir un día más e intentar sea un poco mejor que el anterior, porque nunca sabremos que nos deparará el mañana, y quizá sea algo maravilloso por lo que merezca la pena vivir.
Espero que hayas disfrutado leyendo este post, y si tienes tiempo, puedas dejarnos en los comentarios tu episodio favorito.