Cuando Paramount Pictures se embarcó con la saga ‘Terminator’, ‘Génesis’ suponía el inicio de unos planes que abarcaban realizar una trilogía, así como una serie de televisión con las que relanzar la franquicia que supuso el salto a la fama del austríaco Arnold Schwarzenegger (‘Conan’, ‘Depredador’, ‘Mentiras Arriesgadas’).
Sin embargo, la cinta dirigida por Alan Taylor (‘Juego de Tronos’, ‘Thor: El Mundo Oscuro’) recibió una acogida bastante tibia por parte de la crítica, y en la taquilla doméstica se la pegó de mala manera. Aún así había ciertas esperanzas por parte los fans de la saga de que esto no supusiera un obstáculo para el proyecto inicial, dado que en el resto del mundo la película fue bien recibida (en especial en China), superando los 440 millones de dólares de recaudación, y convirtiéndose en la segunda película más taquillera de la franquicia, sólo por detrás de ‘Terminator 2: El Juicio Final’.
Pero al parecer esto no ha sido suficiente para convencer a la productora. Según The Hollywood Reporter, y en palabras de Paramount, las dos futuras secuelas que había previstas se han detenido indefinidamente y han quedado fuera de su calendario. Y es que a pensar de la ostentosa recaudación recibida, a los 155 millones de dólares de presupuesto del film habría que añadir el desorbitado coste de las campañas promocionales de la cinta, con lo que habría quedado un margen insuficiente de beneficios.
En Hollywood por desgracia, no sólo basta con tener ideas para crear una película, hay que hacer negocios con ellas y que generen dinero, especialmente hoy en día, y eso parece que es algo que ‘Terminator’ no ha sabido hacer con el paso del tiempo. En 2019 es cuando James Cameron (‘Aliens: El Regreso’, ‘Titanic’) recuperaría los derechos de la licencia que creó, y quizá él sería el único capaz de resucitarla, pero con sus planes para las secuelas de ‘Avatar’ manteniéndole ocupado durante los próximos años, el destino de la franquicia parece más incierto que nunca. ¿Habrá llegado el momento de decir «sayonara, baby», o por el contrario el T-800 «volverá»?