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‘Hannibal’: sangre exquisita

En 2013 la cadena NBC estrenó una serie basada en uno de los grandes clásicos del cine moderno: El silencio de los corderos (The silence of the lambs, 1991). Muchos estaban convencidos de que no pasaría de ser una adaptación más y que la sombra de la película de Jonathan Demme, y sobre todo la de Anthony Hopkins y Jodie Foster, perseguiría a la serie que decidió centrarse en la vida de Hannibal Lecter antes de ser encarcelado. Sin embargo, su historia, basada en la precuela narrada en la novela de Thomas Harris El Dragón Rojo, sacó músculo y demostró tener personalidad propia, convirtiéndo a Hannibal en uno de los estrenos más destacados del año.

Para interpretar al protagonista (que nació en realidad como secundario) se optó por el actor danés Mads Mikkelsen, una excelente opción para encarnar al refinado, hipnótico y seductor psiquiatra. Su rostro petrificado, sus ojos afilados y un porte elegante potenciado por el exquito vestuario de Tom Ford hicieron olvidar rápidamente a su predecesora. Y es que la creación de este actor conocido por sus interpretaciones en Casino Royale o la fabulosa La caza, que optó a Mejor Película extranjera en los Oscars de 2013, es magnética y sibilina, con una capacidad de seducción de la que la interpretación de Anthony Hopkins carecía. Pese a ello, en los Emmys siguen empeñados en ningunear su trabajo y en las nominaciones para la ceremonia del 25 de agosto no se han acordado de su Hannibal Lecter.

Además de la interpretación de Mikkelsen, la serie se sustenta en la potencia psicológica de los personajes, en el juego de música y silencios, en la inteligente composición de planos y en la atmósfera que es capaz de crearHannibal es obsesiva, oscura e inestable, tanto como el segundo de sus protagonistas, el criminólogo del FBI Will Graham (Hugh Darcy), en cuyo punto de vista se sitúa la narración de los capítulos. En esto el creador de la serie, Bryan Fuller, optó por una inteligente decisión, ya que sólo permite al espectador observar al doctor Lecter desde un punto sesgado que mezcla admiración, repulsa y manipulación, que es precisamente lo que experimenta Graham al llevar al extremo su capacidad de empatía con los asesinos en serie a los que analiza. Ese vivir en primera persona un asesinato es una de las facetas enfermizas de la historia (la otra, sin duda, son los exquisitos platos que prepara Hannibal), que poco a poco va retorciéndose a la vez que la mente de Will, que entra y sale de la realidad de manera constante a través de las preciosas imágenes oníricas en las que interviene el reno negro y la figura diabólica de su némesis.

Así, Fuller juega a mezclar sueños, miedos, oscuridad y muerte, elaborando un plato elegante que combina elementos impensables en una serie de televisión de una cadena generalista como la NBC. Quizá por ese motivo la serie ha experimentado sus altibajos en lo que se refeiere a audiencias, aunque ha logrado hacerse finalmentecon una legión de seguidores incondicionales.

El arte del crimen

Uno de los aspectos más horrendos y atrayentes de Hannibal es la escenificación de los asesinatos que inventigan Will Graham y el equipo de Jack Crawford, jefe del FBI que interpreta el enorme Laurence Fishburne. Cada uno de ellos está pensado como una obra de arte, y tiene su propio "diseño" y resonancias. Claramente son imágenes desagradables, pero también, de alguna manera, composiciones enfermizas y a la vez admirables como los platos que cocina Hannibal en su casa: visualmente deslumbrantes, e impactantes, dejan un regusto extraño pero sorprendente en el paladar. Un hombre del que salen las ramas florecidas de un árbol, la composición de un ojo formado por cadáveres humanos que mira el cielo, ángeles protectores o el músico fusionado con su instrumento son algunos de las "obras de arte" que el asesino de Hannibal va a dejando a su paso. Una suerte de arte grotesco y angustioso que atrae y repele al espectador a partes iguales sobre todo por esa fotografía preciosista y delicada que combina horror con luz y oscuridad.

¿Y qué pasará en la tercera temporada?

Tras la emisión de las dos primeras temporadas que han ido de menos a más, y gracias al apoyo de una audiencia sólida (se estima que en torno a 3,9 millones de espectadores vieron cada semana los episodios de la serie de la NBC) y a una legión de seguidores en redes sociales, la network estadounidense ha decidido renovar Hannibal por una tercera temporada.

Los interrogantes abiertos en el último capítulo, dominado por un impactante cliffhanger que dejó a muchos pegados a los sillones, siguen en la retina de los espectadores que poco a poco van recibiendo noticias de la marcha de la nueva temporada en lo que se refiere a personajes y argumento.

Una de ellas es la presencia segura del personaje de Laurence Fishburne, y la incorporación en la trama de elementos de las novelas Hannibal Rising y Hannibal. Según ha declarado Bryan Fuller, "mi esperanza es realizar una historia complementamente diferente de Hannibal Lecter en esta temporada." Fuller también habló de la posibilidad de incluir en el elenco de actores al cantante David Bowie.

Según informan algunos medios, la tercera temporada llegará a finales de 2014 o principios de 2015. La esperamos con impaciencia.

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