Niño de Elche, originario de Elche, Alicante, nació en 1985. Muy joven comenzó su trayectoria musical especializada en el flamenco, pero pronto comenzó a ver diferentes ámbitos artísticos de una manera atractiva para él. Considerado como uno de los mayores renovadores del flamenco, Niño de Elche es tan laureado como criticado, pero su arte no deja indiferente.
En esta ocasión hemos tenido la suerte de hablar con él por ‘Canto cósmico: Niño de Elche’, un documental cuya sinopsis oficial dice que se aproxima al Niño de Elche, el músico español más controvertido de los últimos años, desde una perspectiva caleidoscópica que abarca desde su esfera más íntima y familiar a las múltiples reverberaciones de su universo poético. Un retrato con personalidad estética propia que integra además un fecundo diálogo colectivo en torno a esa genealogía artística profundamente española surgida de la dialéctica entre ortodoxia y vanguardia, entre tradición y subversión.
Jaime: Lo primero, enhorabuena por el documental. Cuéntanos un poco como surgió ‘Canto cósmico: Niño de Elche’, porque tengo entendido que fue hace bastantes años cuando te llegó la propuesta…
Niño de Elche: Sí, fue hace siete años que me llegó la propuesta de Marc Sempere, después del concierto que hice en Sevilla, en la presentación de un disco que hice en 2005 que se llama Voces del extremo. A partir de ahí él me propuso, después de unas semanas, y aquí estamos después de siete años.
Jaime: ¿Lo aceptaste enseguida o reflexionaste sobre hacerlo o no?
Niño de Elche: No reflexioné mucho, la verdad. No reflexioné mucho… hace siete años no tenía tantos gestos de cariño, por decirlo así.
Jaime: El documental, la película, tiene un lenguaje cinematográfico poco convencional, un poco como tu obra. ¿Diste total libertad creativa o hay muchas de tus ideas propias dentro del documental?
Niño de Elche: Pues no… di totalmente libertad porque entendía que tenía que ser así. Yo como artista y creador, lógicamente entiendo que los procesos deben tener ese espacio. Luego me preguntaron todo, y me preguntaron, sobre todo por las escenas más performativas, el contenido que iba a haber más musical, yo le proponía cosas, pero desde su iniciativa y sus intereses discursivos y estéticos, faltaría más. No podía ser de otra forma.
Jaime: ¿Crees que el mundo cinematográfico permite una experimentación que suele ser menos criticada que, por ejemplo, en la música, tu terreno?
Niño de Elche: Depende del contexto mediático en el que se encuentre la propuesta, todo eso depende… yo la verdad que… a mí se me critica pero es verdad que las críticas van bajando cada vez más en intensidad, entonces… pues depende del contexto. Si voy a un festival de flamenco la crítica va a ser mucho más extravagante, por decirlo así, y esta película si la metes en un festival convencional pues también sería totalmente criticada en un sentido negativo, como tantas otras. Aquí la cuestión está en si existe una red para que todo tipo de proyectos pueda tener su espacio y el público pueda acceder a ello.
Jaime: En la película hablas de tus miedos, tus relaciones, tu manera de ver el amor… ¿ha habido algo que tu dijeses «no querría hablar de esto» o «me da un poco de cosa», o por el contrario no tuviste ningún tipo de problema en todo lo que se cuenta?
Niño de Elche: Yo siempre que colaboro en un proyecto hay cosas que me dan cosas, hay reparos, lógico. Pero precisamente hago proyectos por eso, para superar ese miedo.
Jaime: Y ¿cuales son los mayores retos con los que te has encontrado en la grabación?
Niño de Elche: Bueno es que… no tengo muchos retos, pero dar reparo sí, claro. Verte en una pantalla grande, o contar según que cosas más intimas, relacionarte con tus familiares, eso bueno, si que es un reto, pero creo que para cualquiera.
Jaime: Aparecen muchos artistas pero también tus padres. ¿Fue muy complicado convencerles para que entraran?
Niño de Elche: No, pero la labor de quien los convenció no fue mía, fue de Marc. Marc es quien ha hecho todo ese tipo de trabajo, de forma excelente. Yo la verdad es que me sorprendí bastante que lo consiguiera.
Jaime: Ya mismo es el estreno, ¿cómo piensas que lo va a recibir el público?
Niño de Elche: Pues la verdad es que no lo he pensado, y claro, yo tampoco… como tengo una relación con los públicos tan extraña, me cuesta pensar en el público. Entonces, yo solo deseo que la gente que vaya a verla, mucha o poca, que le atraviese de una forma u otra. No por mi persona, si no por los personajes que salen, por lo que cuenta la película, por lo que muestra, mejor dicho.
Jaime: Justo eso te iba a preguntar: ¿qué es lo que querrías que se quedase el público del documental?
Niño de Elche: Para mi una idea bastante clara: que tengamos conciencia que estamos en una sociedad sorda pero que siempre terminan escuchando si tu pasión y tu fe es ciega.
Jaime: No te quiero robar mucho más tiempo: recomiendanos una serie o película que te guste, que todo el mundo debería ver.
Niño de Elche: Una que me marcó muchísimo es ‘El caballo de Turín’ de Béla Tarr.
Jaime: Te agradezco mucho este ratito y desearte toda la suerte del mundo con el documental y con todo lo que hagas, muchas gracias.
Niño de Elche: Gracias a ti por tu tiempo y tu dedicación, tu interés. Un abrazo.
Jaime: Un abrazo.
Tráiler de ‘Canto cósmico: Niño de Elche’.
Imagen principal: elespanol.com