¿Quién no ha visto alguna película basada en alguna novela de Nicholas Sparks? El autor romántico por antonomasia es uno de los que más adaptaciones al cine tiene. De hecho, las casualidades del destino hacen que dos películas basadas en dos novelas suyas se encuentren en la cartelera española. Por un lado está ‘Lo mejor de mí’ y por otro está ‘El viaje más largo’, cuyo estreno es una semana después. Ahora toca hablar de la primera, que llega a España con seis meses y medio de retraso, algo inusual tratándose de una producción basada en uno de los best-sellers del autor.
Dawson y Amanda se enamoraron profundamente durante su etapa en el instituto. Ella venía de una familia rica, él de una problemática donde le maltratan. Las diferencias de clases harán de este amor una relación imposible, en la que el padre de ella se entrometerá impidieron que Dawson esté con su amada. 20 años después, tras la muerte de un amigo común, los jóvenes enamorados se reencuentran… Pero los años han pasado y sus almas ya no son las mismas. Sin embargo, la pasión resurgirá y entre ellos volverá a renacer el amor.
El mundo de la novela rosa es todo un campo que suele estar denostado por una gran parte de la sociedad y la crítica, convirtiéndose en un placer culpable en la mayoría de los casos. El universo de las novelas de Sparks es fácil de averiguar, casi todas sus novelas tienen los mismos patrones pero no han sido impedimento para convertirse en historias leídas por múltiples personas en todo el mundo.
Eso no significa que sea bueno, el patrón se repite también en cada una de las películas. Una fórmula que funcionó bien en algunas como ‘Mensaje en una botella’ o ‘El diario de Noah’ pero que en las siguientes producciones ha ido hacia menos pese a fichar a importantes cineastas como Lasse Hallström o tener actores de la talla de Richard Gere, Tom Wilkinson o Diane Lane. La última, ‘Lo mejor de mí’, es un claro ejemplo de desgaste en la fórmula.
La trama queda reducida al puro homenaje al romanticismo eterno, con una serie de drama y tragedias, una tras otra, como si de un culebrón malo se tratase. Cierto es que ese tipo de situaciones son necesarias para darle mayor dramatismo a la historia; pero en ‘Lo mejor de mí’ el exceso es historias avocadas a la tragedia para exaltar al primer amor, único en la vida parece ser (según la propuesta). No deja respirar al espectador, entre los flashbacks y las imágenes del momento presente hay un suceso dramático.
Pese a contar con un director solvente; Michael Hoffman estuvo detrás de ‘Un día inolvidable’, ‘El sueño de una noche de verano’ y ‘La última estación’, y unos actores con solventes trabajos (Michelle Monaghan estuvo en ‘Código fuente’ y ‘Adiós, pequeña, adiós’, mientras que James Marsden es conocido por haber sido Cíclope en la saga ‘X-Men’), estos no consiguen levantar una película romántica al uso, ideal para ser vista en las sobremesas de las 16:00. Las adaptaciones cinematográficas de Sparks pueden ya compararse con los telefilmes alemanas basados en novelas de género rosa de autoras como Rosamund Pilcher e Inga Lindström o los telefilmes basados en las novelas de la reina del género, Danielle Steel. Al menos estas producciones son más honestas con el espectador.
‘Lo mejor de mí’ puede ser la obra más floja del “universo rosa de Nicholas Sparks”. Cierto que su sucesora, ‘El viaje más largo’, levanta un poco el vuelo respecto a ésta pero, una vez más, continúa con una fórmula trasnochada que debería renovarse.