En 2003 la HBO estrenó una serie extraña e inusual que se ha convertido en uno de esos ejemplos de ficción de calidad "maldita". En este caso, la serie no contó con el respaldo suficiente de la audiencia y fue cancelada tras sólo dos temporadas por sus elevados costes de producción.
Creada por Daniel Knauf Carnivàle narra la historia de un grupo de personajes que pertenecen a un circo ambulante que recorre las empobrecidas ciudades americanas durante la Gran Depresión, mientras, como telón de fondo, se desarrolla una batalla dialéctica entre el bien y el mal. En esta línea ambiciosa, en la serie se mezclan elementos religiosos, proféticos, históricos o fantásticos, dando lugar a una serie extraña a la que se ama o se aborrece.
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La cabecera de Carnivàle es una pequeña obra maestra de la producción de títulos de crédito y refleja muy bien el ambiente asfixiante y malsano que impregna a la serie. El destino es uno de los núcleos principales en torno al cual gira la trama de esta ficción, y tal es el punto de partida de la cabecera, que juega con las imágenes de una baraja de tarot que presenta ante el espectador escenas de la Gran Depresión entre las que deambulan los personajes de las cartas.
Los títulos de crédito de Carnivàle corrieron a cargo de la productora Elastic y fueron obra del director creativo Angus Wall. Esta productora también está detrás de grandes cabeceras como las de Juego de Tronos, True Detective, The Americans o Masters of Sex.
Por su parte, la música de la cabecera de Carnivàle fue obra del compositor de bandas sonoras de Hollywood Jeff Beal.
Si vemos el recorrido argumental de la cabecera, nos encontramos con una narración coherente en la que el espectador recorre el destino de los Estados Unidos y del mundo tras el crack del 29.
Así, en la primera carta, "El Mundo", se presenta el universo de los trabajadores que se vieron empujados hacia la pobreza tras el desplome de los bancos. Le sigue "El as de espadas", que contiene los avances tecnológicos a los que ayudaron esos trabajadores. A continuación aparece la carta de "La Muerte", tras la que aparecen escenas de mineros, fascistas, estalinistas y el ku klux klan. Después llega "El rey de espadas" y "La templanza", tras la que surgen imágenes de gente bailando y deportistas como el corredor Jesse Owens o el jugador de basebol Babe Ruth. La carta de "La magia" da paso a "La torre", tras la que aparecen imágenes de la Casa Blanca y Roosvelt. Cierran la peculiar lectura de este tarot que compone la cabecera de Carnivàle las cartas del Diablo y Dios, que terminan empujadas por un viento seco que las mueve de la tierra.
Inspiradora, redonda e impecable.
Vía Elastic | HBO | McGulfims de Expansion | Un mundo de cine (Fernando Rodríguez Laso)